Dennis Hopper, muy deteriorado, recibe su estrella en el Paseo de la Fama

El actor Dennis Hopper, de 73 años, recibió hoy su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood acompañado de numerosos amigos, como Jack Nicholson, y visiblemente debilitado por el cáncer de próstata que padece.

Hopper, protagonista de películas como "Easy Rider" (1969), muy delgado, apareció con varios vendajes debido a una caída reciente y requirió de ayuda para subirse al estrado y dirigirse a los presentes.

"Me han dado una vida que nunca habría imaginado siendo un chico de Dodge City, en Kansas", comentó Hopper, quien, según informó esta semana su abogado, Joseph Mannis, se encuentra en estado terminal.

La estrella del actor se convirtió en la número 2.403 del Paseo de la Fama y fue situada a la altura del emblemático teatro Egipcio del bulevar de Hollywood.

No faltaron a la cita actores como Jack Nicholson, el director David Lynch o el cantante Johnny Mathis, si bien fue Viggo Mortensen junto al productor Marc Canton quienes glosaron la vida y la trayectoria de Hopper.

El homenaje podría suponer la última comparecencia pública del veterano actor, según predice la prensa estadounidense, después del informe presentado por Mannis ante el juez que lleva el caso de divorcio de Hopper.

En esos documentos, el abogado explicaba que su cliente apenas pesa 45 kilogramos y que ya ni siquiera está en condiciones de someterse a sesiones de quimioterapia para tratar de acabar con la enfermedad.

Mannis alegó la debilidad de Hopper para impedir que tenga que prestar declaración en la vista oral fijada para el próximo 5 de abril sobre su divorcio de su esposa, Victoria.

La pareja se casó hace 14 años y el actor pidió la separación en enero.

El doctor que sigue la evolución de la salud de Hopper desaconsejó su comparecencia ante la Corte aunque sí consideró positivo que acudiera al Paseo de la Fama de Hollywood.

En febrero, Hopper indicó que mantenía la esperanza en que los tratamientos de quimioterapia a los que se sometía fueran exitosos y pudiera retomar pronto su trabajo.

En octubre pasado, el actor inició un tratamiento especial contra el tumor en la Universidad del Sur de California (USC), de Los Ángeles.

El intérprete fue hospitalizado el pasado 30 de septiembre en Nueva York debido a unos síntomas similares a los de la gripe y a dolores de estómago, pero pudo salir por su propio pie al día siguiente.