Este artículo se publicó hace 13 años.
El desconcierto se apodera de los mercados
La prima de riesgo italiana marca un nuevo máximo en los 467 puntos
En la mayoría de los casos, la realidad supera la ficción; pero la escena de ayer del primer ministro italiano Silvio Berlusconi negando los rumores de su dimisión (noticia difundida por un periódico de su propiedad) a través de su muro en la red social Facebooky en su Twitter, parecía sacada de un mal guión de comedia barata.
Lo peor es que es un pésimo ejemplo de hasta qué punto la situación política está condicionada por unos movimientos especulativos que permanecen de espaldas a cualquier noticia empresarial o económica y sólo tienen ojos para sus propios objetivos. Y ahora en primera línea está Italia, y sobre todo un Gobierno que no parece especialmente diligente a la hora de aplicar las medidas de ajuste que exigen esos llamados "mercados".
Berlusconi ahoga la euforia que provocó el rumor de su dimisión
Sólo así se explica la espectacular subida que registraron las bolsas europeas a media mañana por el mero rumor de la dimisión de Berlusconi y que la prima de riesgo de Italia llegara a bajar en apenas unos minutos de los 492 puntos básicos a 470. Porque, mientras eso ocurría, todas las excusas que más tarde servirían para justificar las caídas ya estaban en el tablero de juego: el futuro político de Grecia, los malos augurios sobre el riesgo de la quiebra del euro, la negativa de los países del G-20 a aportar más dinero para los rescates europeos. Incluso la enésima decepción del año por parte de una China que no acude presta y veloz a las demandas de dinero que se hacen desde Europa.
Pero, sólo después de que Berlusconi hiciera uso de las redes sociales para negar cualquier intención de abandonar voluntariamente el poder, esos temores volvieron a tomar fuerza y fueron la justificación para retomar las ventas. Todas las bolsas europeas se tiñeron de rojo, con dos incomprensibles excepciones: Italia que subió un 1,32% y Portugal que esquivo las caídas al arañar un 0,21%. España, en cambio, fue el mercado más castigado y el Ibex 35 bajó un 1,4%, hasta los 8.476 puntos.
"Los mercados están desconcertados. Nadie sabe cómo va a terminar todo esto. Parece que el nuevo Gobierno de transición griego podría canalizar con más facilidad las imposiciones de Europa, pero eso sólo sirve para trasladar el miedo a Italia. Un país con unas finanzas desastrosas y un tamaño que hace imposible un rescate", advierte Soledad Pellón, estratega de IGMarket.
La rentabilidad que se exige a la deuda italiana está en nivel de riesgo
Mercado de deudaEl efecto dimisión de Berlusconi se difuminó rápido en el mercado de deuda y la sesión terminó con la prima de riesgo italiana en 467 puntos básicos y la rentabilidad de su bono a diez años en el 6,6%, su nivel más alto desde la entrada del euro. Ambos acercándose a los niveles en que Irlanda y Portugal fueron rescatados (por encima del 7%). En España el riesgo país cerró en los 365 puntos básicos, con la rentabilidad en el 5,633%.
El euro aguantó los malos augurios y apenas bajó ayer un 0,2% hasta 1,375 dólares.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.