Detenidas 9 personas en Tenerife y Barcelona por robar en 44 naves industriales

La Guardia Civil ha detenido a siete personas en Tenerife y a dos en Barcelona a las que se imputan 44 robos en naves industriales y establecimientos comerciales de Tenerife y La Palma, informó hoy el subdelegado del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, José Antonio Batista.

El subdelegado, junto al general jefe de la Zona de la Guardia Civil en Canarias, Miguel Martínez, dijo en rueda de prensa que los detenidos formaban una organización internacional, y explicó que entre las personas detenidas, siete varones y dos mujeres, hay dos rumanos, dos kosovares, un albanés, un eslovaco, un sueco, un checo y un español.

La operación "Adriático" comenzó hace un años después de se recibiesen denuncias por robos cometidos en polígonos industriales de La Pala y Tenerife.

Los robos tenían en común que se cometían en varias naves o comercios a la vez en la misma noche, en especial en días festivos o en puentes, y en alguna ocasión se cometieron seis en un mismo día.

Según la Guardia Civil, los robos se cometían con un alto grado de conocimiento de los sistemas de alarma, que se inutilizaban de forma sistemática, y los autores de esos hechos utilizaban herramientas de precisión que permitían actuar con rapidez.

Los autores de estos robos sólo sustraían dinero y las cajas fuertes las "reventaban" en las naves.

La dificultad para identificar a los autores de estos robos estaba en que cambiaban de vehículo y de domicilio de forma continua, pero agentes de la Guardia Civil lograron comprobó que varios sospechosos que residían en el municipio tinerfeño de Puerto de la Cruz y eran originarios de países del este europeo mantenían contactos con residentes en Barcelona.

En la ciudad condal han sido detenidos dos de los miembros de esta organización, que también tenía contactos en Grecia e Italia.

El grupo estaba organizado de forma que tenía al mando un jefe o líder que daba las instrucciones y señalaba las empresas, polígonos industriales y fechas en las que debían cometerse los robos, se indica en un comunicado de la Guardia Civil.

Durante los registros domiciliarios se encontraron armas como un AK-47, dos pistolas y chalecos antibala, por lo que para su detención en Tenerife se contó con el apoyo de un grupo rural de seguridad especialista en asaltos.

Una vez que el jefe del grupo decidía el lugar del robo algunos miembros de la organización realizaban tareas de vigilancia mientras que otros se introducían en los inmuebles por el procedimiento del "butrón" o rompiendo puertas y ventanas, tras inutilizar las alarmas y las cámaras de seguridad.

La Guardia Civil explica que una vez cometidos los robos utilizaban un vehículo de "lanzadera" para advertir de la posible presencia policial.

Los tenidos también han sido acusados de delitos de asociación ilícita, falsedades documentales y blanqueo de capitales, y si bien no se ha cuantificado de forma exacta la cantidad de dinero sustraída se cree que supera el medio millón de euros.

Parte del dinero robado, según las investigaciones de la Guardia Civil, se ha remitido mediante giros postales a familiares de los detenidos.

Los agentes de la Guardia Civil han realizado cinco registros domiciliarios, cuatro de ellos en Puerto de la Cruz y uno en la provincia de Barcelona.

En Tenerife se han encontrado 10.000 euros, veinte teléfonos móviles, cuatro aparatos de comunicación, joyas relacionadas con los hechos investigados y recibos de envío de dinero al extranjero, entre otro material.

En Barcelona se han hallado dos pistolas automáticas, un fusil de asalto AK-47, material informático y electrónico, documentación falsificada y diversas herramientas.