Agentes de la Policía Nacional han detenido este martes a dos jóvenes por su vinculación en el incidente de la ikurriña del día del chupinazo de las fiestas de San Fermín del pasado día 6, según han informado fuentes policiales.

Estas mismas fuentes aseguran que la operación continúa abierta por lo que no se descartan nuevos arrestos.

 El pasado 6 de julio, el Ayuntamiento de Pamplona tuvo que retrasar durante 20 minutos el lanzamiento del tradicional chupinazo -un cohete- que marca el inicio de la fiesta de San Fermín por la colocación de una gran ikurriña sobre la plaza Consistorial, que impedía lanzar este artefacto pirotécnico.

La bandera de más de seis metros de ancho había sido colocada por dos individuos disfrazados con barba y peluca que se habían subido a un tejado de la plaza Consistorial para después colgar la bandera vasca sobre una cuerda. La práctica totalidad de los grupos municipales excepto Bildu,  mostraron su rechazo a este acto que retrasó el inicio de la popular fiesta.

Los tres detenidos este martes en Pamplona por agentes de la Policía Nacional son Endika Garay Vales, nacido en septiembre de 1989, Artzai Santesteban Arizcuren, nacido en mayo de 1984 y Jon Karmelo Lizarazu Mendibe, nacido en abril de 1985, según han informado fuentes policiales.

Estas mismas fuentes han precisado que los tres han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción Número 4 de Pamplona, acusados de desórdenes públicos.

En la mañana del día 6, coincidiendo con el chupinazo que da inicio a las fiestas de San Fermín, este grupo provocó diferentes altercados en la calle Chapitela portando banderas en defensa de los presos de ETA.

Las fuentes consultadas apuntan a que las detenciones se deben a una pelea.Las misma fuentes aseguran que no se descartan más detenciones relacionadas con estos hechos. Aunque inicialmente se había barajado que las detenciones tenían relación con la colocación de la ikurriña gigante, las fuentes consultadas apuntan a que las detenciones se deben a una pelea registrada en los alrededores de la plaza Consistorial.

Uno de los más molestos era el alcalde de Pamplona, Enrique Maya: 'Se ha intentado torpedear seguramente el momento más importante del año en la ciudad. Es una vergüenza'.

Tras reconocer que no ha conocido 'nunca' lo ocurrido hoy, Maya ha criticado a Bildu. 'Nunca nadie sabe nada, es la táctica de Bildu, de los radicales', dijo, para afirmar que 'vamos a intentar averiguar cómo ha sido y qué participación ha habido por parte de los que viven ahí'.

Bildu:'Se nos ha acusado de algo en lo que no tenemos nada que ver'. La portavoz de Bildu, Eva Aranguren manifeso que su grupo no tiene 'nada que ver' con lo ocurrido en el chupinazo. 'Nos hemos enterado del hecho de la ikurriña al mismo tiempo que el resto de concejales', dijo, para indicar que 'se nos ha acusado de algo en lo que no tenemos nada que ver'.

Tras señalar que ella llevaba su reivindicación en la muñeca, Aranguren indicó que el tamaño y la ubicación de la ikurriña 'excede lo que debería ser una presencia normal de la ikurriña pero como no se da esa normalidad se buscan este tipo de soluciones'. 'Soy partidaria de una normalidad, en la que trataremos de trabajar', dijo.

Uxue Barkos, portavoz de NaBai, señaló que 'quienes hemos defendido que la ikurriña debe estar en el balcón del Ayuntamiento de Pamplona por derecho propio, junto con otros símbolos, no podemos aceptar nunca y es triste que hoy alguien haya colocado una ikurriña para estropear el arranque de los Sanfermines'. Según dijo, lo ocurrido es 'doblemente sentido por quienes nos sentimos identificados con ese símbolo pero no con esa manera de imponer las cosas'. 'Lo pasado pasado está', concluyó la diputada.