La Audiencia Nacional ha dictaminado hoy que el exportavoz de Batasuna Arnaldo Otegi puede ser juzgado antes por tratar de reconstruir la ilegalizada formación con Bateragune que por la financiación de ETA a través de las herriko tabernas, al entender que las sentencias en ambos casos son independientes.

La sección tercera de la Sala de lo Penal rechaza así en un auto una de las cuestiones planteadas por la defensa de Otegi en la vista de los artículos de previo pronunciamiento, celebrada el pasado día 5 como paso previo al señalamiento del juicio en la causa de Bateragune, abierta en 2009.

La abogada de Otegi, Jone Goiricelaia, expuso en la vista que su cliente debía ser juzgado antes por la causa de las herrikos, por ser esta más antigua -se abrió en 2002- y por estar acusado en ambas del mismo delito: integración en la organización terrorista ETA, por lo que si era condenado en ese primer procedimiento ya no podía ser juzgado en el otro por el mismo delito.

El tribunal, que preside Ángela Murillo, sostiene sin embargo que los objetos de enjuiciamiento en ambos casos son diferentes, lo que le lleva a "descartar" que la sentencia por Bateragune "sea dependiente" del fallo que se alcance en otros procedimientos.

Esta observación es válida para Otegi y para otra de la acusadas, Sonia Jacinto, encausada en otro procedimiento por su presunta participación como tesorera en la estructura de financiación de ANV (Acción Nacionalista Vasca) y PCTV (Partido Comunista de las Tierras Vascas).

Goiricelaia, abogada de ambos, alegó en la vista que respecto a sus clientes se había producido "litispendencia" al estar los dos imputados en procedimientos similares al de Bateragune.

La Sala ha tenido por tanto que dirimir "si se trata de una misma o distinta presunta actividad delictiva" y "si concurren o no obstáculos insalvables que impidan la celebración de este juicio sin que antes se hayan celebrado aquellos".

En el caso de Bateragune, explica que "se juzgará la supuesta pertenencia de los acusados al organismo denominado Bateragune" y en en las otras dos causas, a Otegi se le atribuye "su intervención en la estructuración de la Herriko Tabernas" y a Jacinto "la financiación de Batasuna a través de una caja común que funcionaba en el seno de las formaciones ANV y PCTV".

"Lo que deriva a que los objetos de enjuiciamiento sean diferentes y a descartar que el pronunciamiento de la sentencia a dictar en este procedimiento sea dependiente del previo fallo acordado en aquellos procedimientos, puesto que en los tres se pretende juzgar conductas totalmente diferentes", concluye la Sala.

Respecto a Jacinto y otro de los acusados en Bateragune, Arkaitz Rodríguez, la defensa también alegó "cosa juzgada" porque los dos habían sido absueltos del delito de integración en organización terrorista en otros procedimientos.

Pero el tribunal discrepa porque "los hechos ya enjuiciados en aquellos procedimientos y los hechos que se atribuyen en éste no son los mismos", ya que "los relatos fácticos insertos en aquellas sentencias absolutorias y el relato fáctico diseñado por las acusaciones en este procedimiento no son en absoluto coincidentes".

En la causa de Bateragune, la Fiscalía de la Audiencia Nacional pide 10 años de prisión para Otegi, Jacinto, el exsecretario general de LAB Rafael Díez Usabiaga y otros cinco dirigentes de la izquierda abertzale, mientras que Voces contra el Terrorismo-Verde Esperanza pide para ellos 14 años de cárcel.

Otegi está en prisión preventiva desde octubre de 2009 por Bateragune y el pasado 20 de abril quedó en libertad provisional en la causa de las "herriko tabernas".