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Diez mil personas recuerdan al periodista Hrant Dink, asesinado hace un año

EFE

Unas diez mil personas, 8.000 según la policía, se congregaron hoy en Estambul para conmemorar el primer aniversario del asesinato del periodista turco de origen armenio Hrant Dink.

"En el mismo lugar y a la misma hora" fue el mensaje con el que miles de personas, entre familiares, amigos, colegas y simpatizantes, se congregaron a las puertas del semanario Agos, donde el periodista fue asesinado de tres disparos el pasado año.

Los manifestantes exigieron justicia para un crimen que conmocionó a la sociedad turca y puso en guardia a muchos contra los excesos del nacionalismo.

"El ruido de la sangre se calla con justicia. Vosotros estáis hoy aquí en busca de justicia y en vuestro silencio crece el grito de la justicia. Pero, ¿qué ha hecho la Justicia aparte de darle una bandera al asesino y hacerse una foto?", criticó Rakel Dink, viuda del periodista asesinado.

Rakel Dink se refería a los numerosos escándalos que han rodeado la investigación y la trama del asesinato.

Apenas unas horas después de que el acusado de ser el autor material del asesinato, el joven Ogun Samast, fuese detenido, los policías que lo capturaron se hicieron fotografiar con él en actitud heroica.

Poco a poco nuevos nombres aparecieron en la trama, entre ellos los de Yasin Hayal, un joven con contactos en partidos ultranacionalistas, y Erhan Tüncel, informador de la policía.

Todo indica además que los encargados de la Dirección de Seguridad de Estambul desatendieron las llamadas de protección de Hrant Dink e ignoraron las informaciones que apuntaban a la comisión del asesinato.

A pesar de que ya se han producido dos sesiones del juicio, los abogados de la familia Dink reclaman que más personas se sienten en el banquillo de los acusados porque sigue habiendo puntos oscuros en el proceso judicial, que se reanudará el próximo 11 de febrero.

"El Estado es el asesino", corearon muchos de los asistentes a la manifestación de hoy que portaban pancartas con el texto "Por Hrant, por la Justicia" en turco, armenio y kurdo, reclamando que se esclarezca la implicación de personal de las fuerzas de seguridad en el crimen.

Otro de los gritos fue "Todos somos Hrant, todos somos armenios", que, desde la muerte de Dink, se ha convertido en un lema contra el nacionalismo y a favor de la convivencia de las diversas etnias y religiones de Turquía.

"¿Cuántos han sido asesinados y cuántos más serán asesinados?", se pregunto con rabia Rakel Dink durante su emotivo mensaje, recordando que, tras Hrant Dink, tres protestantes fueron degollados en la ciudad de Malatya y que también en este caso los acusados están relacionados con grupos ultranacionalistas.

Hrant Dink fue un importante intelectual que dedicó buena parte de su vida y de sus escritos -en el semanario bilingüe 'Agos' y en el diario izquierdista 'BirGün'- a combatir el nacionalismo existente en Turquía y a mejorar la convivencia entre turcos y armenios.

Pero por calificar de genocidio las matanzas de armenios a manos del Imperio Otomano en 1915, Dink fue condenado a 6 meses de cárcel en base al polémico artículo 301 del Código Penal, aunque su condena fue conmutada.

"Ojalá lo hubiesen metido en la cárcel, así ahora viviría", lamentó Rakel Dink, en referencia al polémico articulo 301, que es considerado el culpable de que tanto Dink como otros intelectuales hayan caído en el punto de mira de los ultranacionalistas.

Las organizaciones de derechos humanos reclaman la abolición de dicho artículo, que castiga con penas de cárcel el "insulto a la identidad turca", y el actual gobierno asegura que en breve será presentada la modificación del articulo.

"Aunque a veces no tenía las mismas opiniones que nosotros, ... era un gran ciudadano de la República de Turquía. Es una gran pérdida para nuestro país", aseguró el ministro de Cultura, Ertugrul Günay, en un acto en la ciudad de Serik.

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