Una delegación de directivos de la Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK), encabezada por su director general Ignacio Sánchez-Asiaín, ha llegado esta mañana a Córdoba para mantener reuniones de trabajo internas y realizar una primera toma de contacto con la ciudad.

Según han informado a Efe fuentes financieras, las reuniones tienen un carácter oficioso y no oficial ya que el proceso de adjudicación de la entidad cordobesa a la BBK no será definitivo hasta que la ministra de Economía, Elena Salgado, ratifique la decisión del Banco de España, algo que se producirá en los próximos días con toda probabilidad.

A pesar de que se desconoce con qué sectores se van a reunir los directivos de la BBK, algunas fuentes apuntan a que mantendrán una reunión con los administradores del FROB e incluso con algún representante de los trabajadores, que podría ser del sindicato Aspromonte, mayoritario en CajaSur.

Por otra parte, el alcalde de Córdoba, Andrés Ocaña, que se encuentra en Bilbao para recoger mañana el "Premio de Fomento de la Lectura" concedido a "Cosmopoética" en un acto que estará presidido por los Príncipes de Asturias, mantendrá esta tarde una reunión con el presidente de la BBK, Mario Fernández, según han informado a Efe fuentes del Consistorio cordobés.

El pasado viernes, cuando se conoció la adjudicación de CajaSur a la BBK, la entidad vasca emitió un comunicado en el que aseguraba que había presentado un "proyecto sólido y realista, que garantiza la viabilidad futura de Cajasur" y anunciaba que mantendría "el compromiso de obra social en Córdoba y Andalucía".

Según esa nota, los activos y pasivos de Cajasur se integrarán en un banco propiedad, al cien por cien, de la caja vizcaína.

Con esta adquisición, la Bilbao Bizkaia Kutxa se convertirá en la séptima entidad financiera de España por activos, con 48.700 millones de euros, de los que 29.800 corresponden a la caja vizcaína y el resto a la cordobesa.