El director del Ballet Nacional de España, José Antonio Ruiz, ha observado hoy en esta compañía un "tope o techo ilimitado, aún por marcar", a pesar de los 31 años transcurridos desde la fundación en 1978 de esa agrupación escénica de la que fue primer bailarín y que ya dirigió entre 1986 y 1992.

"Al igual que ocurre en el resto de la sociedad, con problemas que la afligen, el baile ha tenido subidas y bajadas. Como en todo, hay que seguir trabajando y no mirarse al ombligo, que suele ser un problema bastante común en nuestra profesión", ha reflexionado Ruiz durante una rueda de prensa celebrada este mediodía en Valladolid.

En el caso del Ballet Nacional de España, del que fue primer bailarín desde su fundación, con Antonio Gades al frente, su actual director ha descansado tanto en los artistas como en sus responsables el "tope o techo ilimitado" que en su opinión tiene y que a su juicio ha demostrado el reciente hito, el último verano, de su debut en el célebre Teatro Mariinsky de San Petersburgo (Rusia).

Esa presencia dentro del festival "Estrellas de las Noches Blancas", con la interpretación de "Elegía" y "Café de Chinitas", representa, como en su día lo fue la primera actuación en el Metropolitan de Nueva York, "un aliciente para seguir trabajando".

De esas posibilidades de crecimiento escénico, José Antonio Ruiz se ha referido a un repertorio con programaciones "totalmente diferentes" y que exigen "una preparación muy especial".

Por todo ello, el Ballet Nacional de España, en palabras de su máximo responsable artístico, atraviesa "un momento extraordinario" que ha acreditado "el eco de la opinión pública y de gente muy conocedora que ha visto toda nuestra evolución".

La compañía actuará en Valladolid entre los próximos 28 y 31 de enero, con el programa elaborado expresamente para el trigésimo aniversario de la misma, estrenado el año pasado en Madrid y que este 2010, tras su paso por el Gran Teatro Calderón de la Barca de la capital vallisoletana, recalará en Granada y en Santander.

El repertorio consta de una parte dedicada a la Escuela Bolera, que desde el siglo XVIII fundió o amoldó hasta el estilismo académico las danzas populares de tradición española, principalmente andaluzas y generalmente de extracción pícara o canal, según los casos.

La segunda parte denominada "Mosaico Andaluz", tendrá como protagonista a la música de Isaac Albéniz (1860-1909) con varias coreografías firmadas por el propio José Antonio Ruiz y por Antonio Ruiz Soler, según fuentes de la organización.

El último eslabón de ese espectáculo, con el lema de "Danza y tronío", consistirá en la interpretación de varias piezas coreografiadas por la prestigiosa Mariemma (1917-2008) a partir de música de Luigi Boccherini (1743-1805) y del contemporáneo Antón García Abril, entre otros.

Se trata de reposiciones de obras estrenadas entre 1958 y 2009, con el vestuario original de cada primera actuación y que, pese al paso de los años, "sorprenderá al público por la riqueza histórica, su frescura, el rigor de su estilo y el talento de su interpretación", ha manifestado el director de la compañía.

"Es un espectáculo hecho para disfrutar", ha concluido José Antonio Ruiz, director, bailarín y coreógrafo que, entre otros galardones, ha recibido el Premio Nacional de Danza (1997) y la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes (2005).