Público
Público

Dragones chinos y Quijotes unidos en una exposición en Shanghai

EFE

El artista español Andrés Alcántara está causando sorpresa y admiración en el público chino con su exposición "Ocho puentes", que acaba de inaugurar en Shanghai (hasta el 29 de febrero) y con la que enlaza las tradiciones culturales de China y España a partir de dragones asiáticos y de la figura de El Quijote.

"Esto es algo que va más allá de mi imaginación: que un artista español, utilizando su propio lenguaje artístico y su talento, sea capaz de expresar así la esencia de la cultura china, y que se pueda combinar tan bien con la española", afirmó a Efe hoy Zheng Peiguang, presidente del Espacio para la Escultura de Shanghai.

"Su manera de elegir y pintar los dragones es correctísima, ha entrado directamente por el alma de la cultura china, y vincula muy bien el misterio que a nosotros nos sugieren los dragones con ese espíritu romántico e imaginativo que tienen tanto (el poeta clásico chino) Li Bai como El Quijote de Cervantes", añadió Zheng.

El recinto que él dirige, una antigua fábrica reconvertida en una de las zonas más de moda para el arte de vanguardia en la ciudad, acoge esta muestra española con una clara vocación de entendimiento cultural, basada en múltiplos del número ocho, cifra china de buena fortuna, y en la idea de tender un puente entre ambas tradiciones.

La exposición consta de dieciséis esculturas creadas mediante talla directa, dispuestas en dos filas de ocho, y de 64 pinturas de dragones, figurativos y abstractos, y retratos de Cervantes y de su Quijote, todas llevadas a cabo con tintas industriales sobre soportes innovadores, lo que da lugar a colores muy vivos.

"Cuando pinto construyo con el color, creando los planos por el contraste de tonos (sin línea ni dibujo previo)", explicó a Efe Alcántara, que en ocasiones utiliza papeles especiales e incluso negativos fotográficos como soporte, a pesar de la dificultad de una técnica que no permite correcciones una vez hecho cada trazo.

El escultor y pintor jienense, afincado en una ciudad tan vinculada a Cervantes como Alcalá de Henares, y apasionado por poetas clásicos chinos como Li Bai, Du Fu y Wang Wei, muestra también diez copias de dos de sus grabados que hicieron creer a varios visitantes que eran de un autor oriental.

"Muchos chinos me han dicho que los grabados no podían ser españoles, que si había estudiado en China, o que si conocía las piedras de unos mantras de no recuerdo qué templo", cuenta Alcántara, que visita por primera vez el país, sorprendido de comprobar hasta dónde había asimilado la cultura asiática.

Con sus imágenes sobre un dragón joven, que muestra sus garras, y uno viejo, que las esconde entre sus barbas, ganó en 2006 el Premio Estampa de Grabado (Madrid) por la combinación de técnicas que utilizó para crear diferentes texturas sobre el papel.

La exposición, llevada a cabo en colaboración con las galerías españolas Art-in-Capitals, ubicada en el Espacio para la Escultura de Shanghai, y Art to Rent, se creó gracias a la editorial Mingaseda, de Alcalá de Henares, y a su directivo y mecenas del artista Jesús Martín, un empresario alcalaíno con negocios en China.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias