La encuesta semanal de intención de voto del instituto demoscópico FORSA, publicada hoy, vuelve a dar la mayoría a una potencial coalición entre la Unión Cristianodemócrata (CDU), sumada a su ala bávara la Unión Cristianosocial (CSU) y los liberales y confirma la tendencia a la baja de los socialdemócratas.

La CDU/CSU de la canciller federal, Angela Merkel, alcanza un 35 por ciento de intención de voto, con lo que pierde un punto frente a la semana pasada, mientras el Partido Liberal (FDP) subió dos puntos para alcanzar el 16 por ciento.

El Partido Socialdemócrata (SPD) perdió dos puntos para caer hasta el 22 por ciento, su nivel histórico más bajo, mientras que su socio potencial de coalición, Los Verdes, ganó un punto y queda en el 10 por ciento.

El Partido de la Izquierda, por su parte, ganó también un punto para llegar al 10 por ciento de intención de voto, a nueve meses de las elecciones legislativas en Alemania.

Según el director de FORSA, Manfred Güllner, el partido que más claramente registra una tendencia al alza es el FDP, aunque todavía no ha explotado todo su potencial puesto que, según el sondeo, un 35 por ciento pueden imaginarse llegar a votar por los liberales.

"El proyecto 18 es alcanzable", dijo Güllner refiriéndose a la meta de lograr el 18 por ciento de los sufragios que los liberales se impusieron, sin alcanzar, en las elecciones generales de 2002.

El FDP formó coalición de gobierno con la CDU/CSU durante los 16 años de la era del ex canciller Helmut Kohl (1982-1998) así como durante buena parte de la llamada era Adenauer y durante el breve periodo de gobierno de Ludwig Erhardt.

Entre 1969 y 1982 el FDP también hizo coalición con el SPD, durante los gobiernos de Willi Brandt y Helmut Schmidt, pero a partir de 1982 ha tenido una evolución que los aleja programáticamente de la posibilidad de aliarse con los socialdemócratas.

Los principales elementos programáticos del FDP son la exigencia de rebajas fiscales, la idea de un Estado que no se entrometa en los mercados y de libertad a la economía y la petición de una mayor regulación del mercado laboral.