Joan Ridao, secretario general de ERC, considera que si en el Tribunal Constitucional (TC) hay dos bloques, uno progresista y otro conservador, significa que no siempre prevalecen los criterios estrictamente jurídicos y que los magistrados actúan siguiendo criterios políticos.

Desde ERC se responde así a la información que hoy publica El País según la cual el TC está "tremendamente dividido" sobre la sentencia del Estatut y tiene dos bloques, uno conservador y otro progresista, "en torno a algunos de los aspectos claves del Estatut de Cataluña, el término nación y la obligatoriedad de conocer el catalán".

Añade además que "el enfrentamiento se extiende también a los derechos históricos y a los símbolos nacionalistas", y que "el patrón que se apruebe para Cataluña será el que copiarán las demás autonomías".

Dice igualmente El País que "el problema de fondo, según fuentes favorables a su constitucionalidad, es que habrá que volver a diseñar el Estado de las Autonomías, ya que de lo contrario supondría un retroceso de 30 años en el desarrollo del Estado constitucional".

Para el secretario general de ERC, "si se confirmara la información de El País, estaríamos delante de algunas paredes maestras que se derrumbarían. El Estatut fracasaría".

También añade que lo que importa es la sentencia, "aunque hay que tomar nota de la falta de discreción en torno a la tarea del TC. Quizá, si se hubiera actuado con más celeridad, se habría podido evitar".

También desde ICV, el vicepresidente Lluís Moreno ha contestado a esta información asegurando que si el bloque conservador del Tribunal Constitucional es contrario al término "nación" en el preámbulo del Estatut y a la obligatoriedad de conocer el catalán, es que "la derecha política y judicial tiene miedo del Estatut porque impulsa el Estado plurinacional", y emplaza al PP a dejar "de utilizar la vía judicial para intentar imponer sus ideas".

En un comunicado, Moreno ha pedido "prudencia" hasta que no se conozca la sentencia del Tribunal Constitucional, aunque ha indicado que el Estatuto es un texto "absolutamente constitucional" porque "fue aprobado por ley en el Congreso".

También ha recordado que el Estatut hace tres años que se aprobó y que se está aplicando "con toda normalidad" y que el uso del catalán es "un derecho y un hecho vivido con normalidad".

Ha añadido que desde ICV se espera una sentencia favorable, ya que de lo contrario "habrá una respuesta unitaria del tejido político y social catalán".