La ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha considerado hoy aceptable la propuesta de la Comisión Europea de estudiar la posibilidad de reintroducir controles fronterizos por causas excepcionales al entender que no supone una reforma del Tratado Schengen de libre circulación de personas.

Jiménez ha recordado que el Tratado de Schengen ya contempla salvedades que permiten volver a poner controles en las fronteras cuando concurren circunstancias como las que podrían haber denunciado Francia e Italia ante la oleada de inmigrantes procedentes del Norte de África.

La ministra ha hecho estas declaraciones a los periodistas al término de su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, donde ha explicado la política de España en el Mediterráneo.

Entre las propuestas presentadas hoy por la Comisión Europea para mejorar el funcionamiento del acuerdo Schengen está la posibilidad de reintroducir los controles fronterizos entre los Estados miembros para afrontar situaciones como la llegada masiva de indocumentados.

Según Jiménez, este proyecto "no es exactamente una reforma" del Tratado Schengen, por lo que no vería objeciones a priori para que se estudie y se llegue a un posterior acuerdo entre los socios europeos.

La titular de Exteriores ha insistido en que España sigue respaldando este tratado, que entró en vigor en 1995, al haber supuesto un avance para Europa.

Ha añadido que se tiene que evaluar si las quejas de Francia e Italia justifican la adopción de esas medidas excepcionales.

Jiménez ha subrayado la necesidad de que cualquier modificación se haga con consenso.

"No podemos dar marcha atrás en la conquista de las libertades y de la libre circulación", ha concluido.