Los expertos piden a la sociedad que reflexione

"Debemos analizar por qué se trivializan las agresiones sexuales, por qué se relativiza toda una escala de valores a los ojos de los adolescentes", pidió ayer el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, tras valorar la coincidencia de las violaciones en grupo perpetradas por menores en los últimos días en Baena (Córdoba) e Isla Cristina (Huelva).

Canalda descartó que se trate de un fenómeno o una conducta generalizada, pero remarcó que están apareciendo conductas de violencia de género cada vez a edades más tempranas. "La sociedad relativiza determinadas conductas, se exponen tranquilamente en televisión como si no fueran excepcionales, y todo eso no puede salir gratis". En este sentido, criticó las teleseries que muestran "con una naturalidad impropia" las relaciones sexuales entre adultos y menores, o la escenificiación de conductas de violencia de género en platós televisivos.

También el Defensor del Pueblo y del Menor andaluz, José Chamizo, destacó ayer la gravedad de que la violencia de género esté "bajando de edad". Para los casos en que los agresores son menores de 14 años y, por tanto, inimputables según la Ley del Menor, Chamizo se mostró partidario de que reciban obligatoriamente "una intervención terapéutica" de sus padres o en un centro para menores con trastornos de conducta.

Ante las voces que ayer reclamaron medidas específicas para que los menores de 12 y 13 años que cometan un delito grave no queden impunes, el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, aseguró que la actual norma permite adoptar medidas socio-educativas y de seguimiento "muy importantes en situaciones dramáticas como estas". Para el titular de Justicia, lo necesario ahora es aplicarlas "rigurosamente" y, sólo después de hacerlo, estudiar una posible reforma "si las Cortes Generales lo exigen".

El Defensor del Menor de Madrid cree que ahora, "más allá de replantearse una rebaja de la edad penal, es necesario analizar qué medidas tomar en el caso de menores de entre 12 y 14 años que cometen una violación, que no es como robar un móvil. Hay que ser más contundentes", agregó Canalda.

Distinta es la postura del Partido Popular. Su secretaria general, María Dolores de Cospedal, anunció ayer que su partido "ya tiene preparada" una reforma de la Ley del Menor porque a su entender resulta "necesario" cambiar una norma que "protege a los menores que cometen actos delictivos, pero no protege a los menores víctimas de delitos cometidos por otros menores". Por ello, su formación pedirá en septiembre que se abra un debate parlamentario sobre esta cuestión, ya que considera necesaria una reforma legal para "acotar la impunidad".

Las asociaciones de jueces se muestran divididas sobre la oportunidad de plantear la reforma legal que reclama el PP, pero todas coinciden en que es necesario actuar en relación con los delitos cometidos por menores de 14 años.

Así, la Asociación Profesional de la Magistratura se opone a un cambio legal y apuesta por mejorar la educación de los menores. Jueces para la Democracia coincide con este planteamiento y su portavoz, Miguel Ángel Gimeno, señaló que no debería hacerse una reforma legal "al socaire de asuntos luctuosos o mediáticos". En cambio, la Asociación de Jueces Francisco de Vitoria no ve ningún problema en rebajar la edad penal a los 13 años.