Familia del canario secuestrado rechaza hablar públicamente de su situación

La familia del empresario canario secuestrado en Venezuela Juan Carlos Benítez Armas ha decidido no pronunciarse públicamente sobre su situación, de la que tuvo noticia recientemente, aseguraron a Efe fuentes de su entorno en Las Palmas de Gran Canaria, su ciudad de residencia.

Empleados de su esposa, María del Pilar Pérez, licenciada en Venezuela que posee su propio negocio en la capital isleña, confirmaron esta tarde en su establecimiento, próximo al hogar familiar de la pareja, que la mujer del secuestrado permanece en espera de más noticias sin hablar siquiera con ellos, sino a través de otros parientes.

Tanto éstos como la propia esposa declinaron, en todo caso, comentar la noticia con los medios de comunicación, al menos de momento, explicaron los empleados.

Juan Carlos Benítez Armas, natural de la isla canaria de El Hierro, fue sorprendido por los delincuentes en la madrugada del jueves en su residencia en la ciudad de Anaco, en el estado de Anzóategui, 390 kilómetros al este de Caracas.

Poseedor de diversos comercios relacionados con el sector ferretero en Venezuela, pese a que vive en Las Palmas de Gran Canaria, había viajado al país suramericano el pasado 24 de junio por motivos de negocios y tenía previsto regresar a Canarias el 21 de julio.