El líder del PP gallego y candidato a la Presidencia de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se comprometió hoy a facilitar a través de ayudas directas y a precios de viviendas protegidas (VPO) el acceso de los jóvenes a los 60.000 inmuebles desocupados que, según calculó, existen en Galicia.

Durante un encuentro con jóvenes en Ourense, a los que dedicó la propuesta que a diario lanza en las mañanas de la campaña electoral, Feijóo se comprometió a 'sentarse' y llegar a un acuerdo con los propietarios de estas casas deshabitadas, entre ellos bancos y constructoras, para bajar el precio de venta y ponerlo a disposición de los jóvenes a un coste similar al de las viviendas protegidas.

El aspirante 'popular' a la Presidencia de la Xunta cree que con este 'nuevo tratamiento político' para una 'nueva realidad' provocada por el parón inmobiliario salen beneficiados 'todos' y apostó por que los jóvenes puedan acceder a esa bolsa de viviendas desocupadas tanto en propiedad como mediante un alquiler con opción de compra a los cinco o siete años.

Así, razonó que con esta propuesta se conseguirá que 'muchísimas empresas' no se vayan a la quiebra, que los bancos conviertan los 'préstamos fallidos' a las constructoras en 'créditos limpios', que los notarios hagan más escrituras, que la Xunta tenga un parque de viviendas a disposición de 'los que no tienen' y que los jóvenes puedan acceder a un inmueble de forma 'inmediata'.

El líder del PP gallego consideró esta propuesta propia de 'un partido joven' y la contrapuso a la 'política salvaje' del bipartito en materia de vivienda. Así, comparó los 30.000 inmuebles nuevos construidos en la última legislatura de Manuel Fraga con los 45.000 de esta legislatura y este '49% más' le sirvió para ironizar con la 'enorme responsabilidad' de socialistas y nacionalistas.

'Se decía que la del PP era la política del ladrillo', exclamó y, frente a esta acusación se comprometió a trabajar con 'vocación de servicio' y para hacer política social, en lugar de para 'hacer rico a nadie' o 'sumar números en la cuenta corriente'.

Núñez Feijóo confesó además que confía en conseguir la mayoría absoluta el 1 de marzo gracias al apoyo mayoritario de los jóvenes, precisamente uno de los flancos débiles de su partido bajo en mandato de Manuel Fraga, y de los indecisos y, tras este diagnóstico, comprendió que socialistas y nacionalistas estén 'preocupados' por ello.

A dos semanas de que los gallegos acudan a las urnas, el actual líder de la oposición en Galicia interpretó con optimismo las últimas encuestas que apuntan a un 30 por ciento del electorado que aún no ha decidido su voto y vio posible lograr la absoluta y recuperar los dos escaños que le faltan en los sondeos si logra el apoyo del 70 por ciento de los indecisos.

También confió la mayoría a los jóvenes, convencido de que la gente joven está 'cada vez más orgullosa de ser votante del PP' y, por eso, los llamó a que se movilicen y acudan a votar el domingo electoral. Como guiño a este colectivo, recordó que él es el más joven de los tres principales candidatos --tiene 47 años-- y también reivindicó el 'cambio generacional' que llevó a cabo desde que tomó las riendas del partido, por lo que dio por cumplido su compromiso de 'reinventar' y 'refundar' la formación presidida durante 16 años por Manuel Fraga.

Así, contrapuso las 'ideologías viejas' de otras formaciones con la 'ideología abierta' del PP, que no se conforma con 'viejos manuales de política' ni 'distingue barreras'. 'Nosotros somos los que de verdad vamos moviendo la sociedad', proclamó y, tras poner como ejemplo que el PP 'no se cierra a ningún idioma', bromeó con que 'hasta Anxo Quintana --líder del BNG--' usó ayer una palabra en inglés en uno de sus mítines, al pedir que el 'after hours' del 1 de marzo sean las urnas.