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El fiscal pide 20 años de cárcel para Ainhoa Múgica por la colocación de un coche-bomba en Logroño

EFE

El fiscal pedirá un total de 20 años de prisión para la dirigente del aparato militar de ETA Ainhoa Múgica Goñi, "Olatz", por ordenar al 'comando Xoxua" el atentado con coche-bomba perpetrado el 10 de junio de 2001 en Logroño, durante el juicio que se celebrará mañana lunes en la Audiencia Nacional.

Según consta en el escrito de conclusiones, Múgica Goñi era desde 1999 y hasta su detención en septiembre de 2002 la jefa de los comandos de la banda terrorista y fue la encargada de planificar desde Francia el atentado cometido en la capital riojana, que no causó víctimas pero sí importantes daños materiales.

Por estos mismos hechos ya fueron enjuiciados y absueltos los dos miembros del 'comando Xoxua", Premín Sanpedro Larrañaga y Jesús María Goikoetxea Garralda.

Un día antes del atentado, el 9 de junio de 2001, los miembros del comando viajaron hasta la localidad francesa de Guetary, donde se entrevistaron con Múgica Goñi, quien les hizo entrega de un turismo Fiat Tempra con matrículas falsas cargado de explosivos y que había sido robado en Francia meses antes.

Previamente, "Olatz" les había ordenado que recabaran información sobre tres posibles objetivos para colocación de un coche-bomba en Logroño: el Banco de España, la sede de Telefónica y el edificio conocido como "Torre de Logroño", escogido finalmente para perpetrar el atentado.

La misma tarde del 9 de junio, los dos etarras llegaron a Logroño y aparcaron el vehículo en el lugar convenido, programando el temporizador de la bomba para que estallara a las 6 y media de la mañana del día siguiente.

A las 5:45 horas del 10 de junio, los terroristas realizaron varias llamadas alertando de la colocación del coche-bomba, que no pudo ser localizado hasta pasadas las 6:10, lo que impidió que las fuerzas de seguridad pudieran desalojar a tiempo a los vecinos de los edificios colindantes.

A la hora anunciada, el artefacto explosivo estalló provocando un cráter de medio metro de profundidad, así como grandes daños materiales tanto en los vehículos como en los inmuebles cercanos, en un radio de unos 300 metros.

Los daños ocasionados por la onda expansiva fueron valorados en casi dos millones de euros y los perjudicados ascendieron al medio millar.

Por todos estos hechos, el fiscal solicita para Ainhoa Múgica una pena de 18 años de prisión e inhabilitación absoluta durante 28 años por el delito de estragos terroristas, así como otra pena de 2 años de cárcel y multa de 12 meses a razón de 10 euros diarios, por el delito de falsificación de documento oficial.

El fiscal pide también que "Olatz" haga frente a las indemnizaciones por los daños materiales ocasionados en el atentado.

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