Este artículo se publicó hace 14 años.
Francia espera desafiar a las críticas en Sudáfrica
La más nueva de las potencias mundiales ha vivido grandes altibajos desde que en 1998 irrumpió en el panorama internacional con una victoria que quebró la hegemonía de los "campeones de siempre" en las copas del mundo.
Cuatro años más tarde, Francia se despidió del Mundial de Japón y Corea en primera ronda, sin ganar un partido y sin anotar un solo gol, a pesar de llegar con la vitola de favorita. Sin embargo, en Alemania 2006, una selección envejecida y sin mayores aspiraciones alcanzó la final y sólo se quedó sin título por Italia y en la tanda de penaltis.
Francia llega a la cita sudafricana en medio de críticas a su juego, dudas por los resultados y una corriente contraria al seleccionador Raymond Domenech, que será relevado en el cargo después del Mundial por el entrenador del Burdeos, Laurent Blanc.
"Les bleus" sólo pudieron finalizar segundos en el Grupo 7 de clasificación, detrás de Serbia, y por eso debió disputar una eliminatoria de repesca frente a Irlanda, que concluyó con la mayor de las polémicas.
Después de vencer en Dublín por 1-0, Francia perdía por el mismo resultado en la prórroga del partido de vuelta jugado en París cuando su delantero Thierry Henry controló una pelota con la mano y centró para que William Gallas anotara el gol del empate y de la clasificación al Mundial.
La actual selección, décima en la clasificación de la FIFA, cuenta con posiblemente el mejor portero francés de la historia, Hugo Lloris, y una destacada solidez defensiva basada en la velocidad y la experiencia, pero padece una pronunciada dificultad goleadora y exhibe importantes carencias en el apartado creativo en el centro del campo.
Francia podría utilizar dos volantes centrales defensivos en un claro 4-2-3-1. La exclusión por enfermedad de Lassana Diarra crea incertidumbre sobre quién acompañará a Jérémy Toulalan en el medio. Alou Diarra y Abou Diaby son los candidatos.
Franck Ribéry y Youann Gourcuff serán los máximos responsables de abrir las defensas rivales, mientras que en punta Domenech optará por la veteranía y movilidad de Nicolas Anelka o la fuerza y el remate del ariete del Toulouse André-Pierre Gignac.
El seleccionador seguramente arranque el torneo con el barcelonista Thierry Henry, máximo goleador de la historia del combinado galo con 51 tantos, en el banquillo ya que su forma física dista mucho de la condición que le convirtió durante su época en el Arsenal en uno de los delanteros más temidos del mundo. El veterano Sidney Govou, del Lyon, y el marsellés Mathieu Valbuena, también tendrán minutos de juego durante el Mundial.
Jugador más conocido: Thierry Henry
Estrella: Franck Ribéry
Posible revelación: Yoann Gourcuff
Plantilla
Porteros: Hugo Lloris (Lyon), Steve Mandanda (Marsella), Cédric Carrasso (Burdeos)
Defensas: William Gallas (Arsenal), Eric Abidal (Barcelona), Patrice Evra (Manchester United), Bakari Sagna (Arsenal), Sébastien Squillaci (Sevilla), Anthony Réveillère (Lyon), Marc Planus (Burdeos)
Mediocampo: Abou Diaby (Arsenal), Jérémy Toulalan (Lyon), Alou Diarra (Burdeos), Florent Malouda (Chelsea), Yoann Gourcuff (Burdeos)
Delanteros: Franck Ribéry (Bayern de Múnich), Djibril Cisse (Panathinaikos), Sidney Govou (Lyon), André Pierre Gignac (Toulouse), Thierry Henry (Barcelona), Mathieu Valbuena (Marsella)
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