El gobernador del Banco Popular de China (PBOC), Zhou Xiaochuan, aseguró hoy que el país asiático desarrolla un papel "pasivo" en la cotización monetaria del dólar estadounidense.

Zhou, que participaba en un foro económico en la capital china, respondió así a las críticas recibidas desde Estados Unidos de que Pekín mantiene el yuan artificialmente devaluado.

"Es como estar presenciando un torneo. Sólo miramos el juego", declaró el gobernador.

El presidente estadounidense, Barack Obama, viajó esta semana a China con la revaluación de la moneda china en la agenda de temas a tratar, aunque no obtuvo resultados concretos al respecto.

También el secretario del Tesoro de EEUU, Timothy Geithner, pidió al país asiático unos mercados "más abiertos" y un sistema cambiario más flexible, ya que Washington denuncia que el yuan está infravalorado, lo que abarata las exportaciones chinas.

China es el principal comprador de bonos estadounidenses en momentos en que el déficit presupuestario de EEUU alcanza ya los 1,42 billones de dólares y Pekín ha expresado su preocupación por un descenso de la cotización de la divisa estadounidense que pone en peligro sus inversiones.

Por otro lado, el gobernador del Banco Popular de China también advirtió de que unos tipos de interés interbancarios excesivamente bajos "desaniman a las instituciones financieras a proveer la adecuada financiación a la economía real".

Esta afirmación contrasta con el último anuncio de Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal (FED), que declaró que mantendrá unos tipos de interés muy bajos durante un período extenso para estimular el crecimiento.

Representantes de Japón y la Unión Europea se manifestaron en términos parecidos a los estadounidenses.

Actualmente, el tipo de interés interbancario de referencia para los bancos chinos se sitúa en el 2,25 por ciento y permanece inamovible desde diciembre del año pasado.

A su vez, el tipo de interés general a un año se halla en el 5,31 por ciento, un dato todavía alto y más enfocado a controlar la inflación que a estimular el avance económico.

El PBOC anunció en verano que mantendría ambas tasas hasta abril del próximo año, en contra de la volatilidad que aplicó a finales de 2008, cuando bajó los tipos hasta en cinco ocasiones ante el estallido de la recesión.