El Gobierno aprobó el viernes un trasvase de hasta un máximo de 20 hectómetros cúbicos a las Tablas de Daimiel, así como una serie de medidas urgentes para acabar con los incendios subterráneos en el parque nacional.

"Con estas medidas, el Gobierno sigue trabajando por recuperar el ecosistema de las Tablas, con cuya salvación el Gobierno está plenamente comprometido", manifestó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega.

El Consejo de Ministros ha aprobado obras de emergencia por valor de 19 millones de euros por parte del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino para detener la combustión de la turba en el subsuelo de Daimiel. Se trata principalmente de obras de tuberías y de instalaciones de bombeos.

Además se va a realizar la compactación y el sellado de las áreas en ignición, y aportar agua procedente de pozos, con el objetivo de humedecer las masas de turba.

El Consejo también ha aprobado la propuesta realizada esta semana por la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura para enviar hasta un máximo de 20 hectómetros cúbicos al Parque Nacional de las Tablas de Daimiel debido a su prolongada situación de sequía.

El trasvase se realizará "cuando las condiciones de transporte ofrezcan las mayores garantías de eficacia", dijo el ministerio.

En los últimos años, la sequía y la construcción de pozos en los alrededores han vaciado el acuífero que existía en Las Tablas, lo que ha provocado la degeneración del humedal. Varias organizaciones ecologistas han denunciado que apenas el uno por ciento de su superficie está inundada.

En un informe presentado en junio, WWF criticó la política agraria de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que según afirmó, ha incentivado el regadío con aguas subterráneas y creado un déficit de 3.000 millones de metros cúbicos en la zona de Daimiel.