El Gobierno pedirá esta tarde la prórroga del estado de alarma

El Consejo de Ministros va a pedir esta tarde al Congreso la prórroga del estado de alarma decretado ante el caos aéreo provocado por el plante de controladores aéreos durante el pasado puente festivo de la Constitución.

Así lo ha anunciado en rueda de prensa el portavoz del grupo parlamentario socialista, José Antonio Alonso, quien ha anotado que casi con toda seguridad la solicitud será votada y aprobada por el pleno de la Cámara Baja del próximo jueves.

"El Gobierno no puede tolerar ningún riesgo de otro paro salvaje y debe asegurar el derecho de todos los ciudadanos a viajar, máxime en estas fechas durante el periodo madrileño", ha afirmado Alonso.

Se ha mostrado convencido el dirigente socialista de que la "mayoría" del Parlamento estará de acuerdo con la decisión de ampliar el estado de alarma.

En este punto, ha criticado la ambigüedad del PP sobre este tema y ha querido advertir al principal partido de la oposición de que "no le va a quedar más remedio que elegir con quién está: si está con el Gobierno y los derechos de los ciudadanos o está en contra de todo ello".

No ha querido adelantar, sin embargo, durante cuánto tiempo se pedirá la ampliación, y ha dicho que será el Gobierno el que determine el plazo esta tarde en su reunión.

Con todo, ha querido dejar claro que este instrumento es "perfectamente legal y legítimo", previsto en la Constitución y en la ley orgánica que desarrolla el estado de alarma.

Un mecanismo previsto jurídicamente en el ordenamiento que está a la altura del "desafío" lanzado por los controladores, ha apostillado.

"Ha habido un paro salvaje, un chantaje, una toma de rehenes y un auténtico chantaje al Estado", ha resumido Alonso, para alegar que el Gobierno tiene la obligación, "y la va a ejercer con toda la responsabilidad", de no permitir que esto vuelva a suceder.

De esta manera, ha señalado, el Gobierno trata de evitar que pase lo ocurrido a comienzos del puente de la Constitución, cuando el abandono masivo e inesperado de los controladores de sus puestos de trabajo obligó a Aena a cerrar el espacio aéreo durante 20 horas.