Los graves incidentes registrados hoy en Beirut, con la quema de neumáticos, la destrucción de vehículos, el ataque a dos periodistas y la detención de francotiradores, han motivado la suspensión de una manifestación convocada por un sindicato cercano a la oposición.

La Confederación General de Trabajadores Libaneses (CGTL) desconvocó la manifestación que estaba prevista para hoy pero mantuvo el llamamiento a la huelga general en todo el país.

Pese a eso, la mayor parte de las calles de Beirut han sido cortadas por simpatizantes de la oposición libanesa, comandada por Hizbulá.

Desde primeras horas de hoy, partidarios de la oposición quemaron neumáticos, destruyeron coches y contenedores con basura para cerrar las carreteras, y arrojaron tierra con camiones para impedir el acceso a sus puestos de trabajo de quienes no secunden la huelga.

En una entrevista con la cadena de televisión "LBC", el jefe de la central sindical, Ghassan Ghosn, acusó al Ministerio del Interior de no haber cumplido con su deber de cerrar las calles y carreteras beirutíes para que pudiera la manifestación comenzara a las 10.00 hora local (07.00 GMT) en la plaza Barbir, para luego pasar por Corniche el Mazra, el barrio de Mar Elias y terminar delante del Banco central del Líbano (BLD) en el Hamra, todos ellos lugares conflictivos donde a menudo se registran choques entre partidarios de la oposición y de la mayoría.

La radio "Voz del Líbano" informó de que dos periodistas del diario independiente "Al Balad" fueron golpeados por la muchedumbre en la calle de Corniche al Mazra y tuvieron que ser trasladados a un hospital.

Asimismo, la mencionada emisora informó de que efectivos del Ejército detuvieron a dos supuestos francotiradores apostados en el barrio de Ras al Nabaa, oeste de Beirut, aunque aún se desconoce a qué facción pertenecen.