La historia del Schindler español

Budapest, abril de 1944. Adolf Eichmann, teniente coronel de las SS nazi, llega a Hungría. Su misión: supervisar el exterminio completo de la comunidad judía húngara, unas 750.000 personas. El régimen de Hitler ya se tambaleaba y el sueño ario comenzaba a hacerse añicos, pero no sus ansias de sangre. Europa, y especialmente España, miraron hacia otro lado. Nadie quería saber nada de las locuras de Hitler, excepto Ángel Sanz-Briz, diplomático de Espa-ña en Hungría, que utilizó su poder para salvar de las cámaras de gas a 5.200 judíos. Esta noche su historia llega a La 1 con El ángel de Budapest (22.15 horas), una TV movie basada en hechos reales.

Esta producción, dirigida por Luis Oliveros y protagonizada por Francis Lorenzo, está basada en el libro Un español frente al holocausto de Diego Carcedo. "Sanz Briz fue una persona normal que la realidad convirtió en héroe, pero en un héroe humano", apunta Francis Lorenzo, que no duda en afirmar que meterse en la piel de este diplomático ha sido el trabajo que más le ha impactado en toda su carrera.

"Sanz-Briz fue una persona normal que la realidad convirtió en héroe"

"En la película recreamos aquellos trenes llenos de judíos que se dirigían a las cámaras de gas. El hecho de pensar que si mi personaje (ÁngelSanz-Briz) no actuaba, esa gente moriría, fue algo que trastocó mi día a día e incluso me afectó a la hora de dormir", confiesa este intérprete, que incluso afirma que sintió el espíritu de Sanz-Briz más de una noche. "No podía pasármelo bien, sentía que aquella gente moría y yo tenía que actuar", relata.

Y así fue la realidad a la que se tuvo que enfrentar este diplomático del régimen de Francisco Franco. Tenía dos opciones: jugárselo todo, su trabajo, su poder y sus influencias, o dejar morir a miles de personas. Entre estas dos opciones, Sanz-Briz optó por la segunda. ¿Cómo?

En 1924, el general Primo de Rivera aprobó una ley mediante la cual los judíos sefarditas con ascendencia española podían adquirir la nacionalidad. Merced a ella, Sanz-Briz obtuvo 200 salvoconductos para otras tantas personas que mediante artimañas y subterfugios diplomáticos transformó en la salvación de 200 familias. Después, amplió los núcleos familiares tanto como pudo. Así, hasta alcanzar la liberación de un total de 5.200 judíos. "Sanz-Briz arriesgó su vida y su carrera, le dio igual todo, porque estaba en una situación en la que él creía que tenía que actuar sabiendo que podía morir en cualquier momento. En aquella época, si eras sospechoso de algo, llegaba un nazi y te metía un tiro sin miramientos", señala Lorenzo.

Redescubrir la historia de Sanz-Briz y llevarla a la pequeña pantalla ha supuesto todo un reto para el equipo de dirección y producción. El objetivo era transmitir la máxima credibilidad posible y, para ello, el telefilme estárodado íntegramente en Budapest. "Para mí, como director, lo más importante era imprimir veracidad, contar una historia que la gente se crea, porque sin credibilidad, tampoco se puede emocionar a nadie", apunta Luis Oliveros, el director.

Francis Lorenzo protagoniza el telefilme 'El ángel de Budapest'

Y precisamente, si algo ha logrado el equipo es imprimir esa veracidad a la historia. Hasta el punto de que los hijos del diplomático dijeron a Francis Lorenzo que, tras ver el trabajo final, habían reconocido a su padre en la pequeña pantalla. "Durante el rodaje, no los quise conocer, para que no me afectara en la interpretación y no sentir la presión de poder hacer algo que no le guste a la familia. Cuando me mostraron su reconocimiento, fue muy emocionante", sostiene Lorenzo.

Ahora, Luis Oliveros espera que esta senda abierta por Televisión Española de llevar a la pequeña pantalla la vida de personas con un sentido "homenajeador" y de "despertar conciencias" no muera en esta iniciativa. De momento, el Schindler español, en referencia a la producción de Steven Spielberg, ya tiene su película.