Honduras logra el apoyo de la OEA para buscar una solución a su crisis interna

Honduras logró ayer el apoyo de la OEA para preservar la institucionalidad democrática del país mediante el envío de una misión que analizará la situación política y promoverá una solución democrática a la crisis a través del diálogo.

El Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), convocado de urgencia a una sesión extraordinaria a petición de Honduras, aprobó por aclamación una resolución que refleja el apoyo de los países del continente americano a Honduras ante la inestabilidad política e institucional por la que atraviesa.

El texto fue adoptado por consenso tras cuatro horas de negociaciones en la sede de la OEA en Washington, después de que el embajador hondureño, Carlos Sosa advirtiera de que "la institucionalidad democrática y el ejercicio legítimo del poder están en riesgo" en Honduras.

El país centroamericano atraviesa una delicada situación política e institucional por el rechazo que ha generado en algunos ámbitos la consulta popular que se celebrará este domingo y que promueve el presidente hondureño, Manuel Zelaya, con vistas a un cambio constitucional, que, según sus críticos, busca su continuidad en el poder.

Zelaya, en declaraciones a un canal venezolano, valoró la decisión de la OEA y afirmó que el apoyo de la comunidad internacional a su Gobierno y al pueblo hondureño ha frenado el intento "coordinado" de varios poderes públicos, alentados por la oligarquía, de derrocarlo.

El mandatario dijo que "ya está bastante superada esta situación" de "proceso de golpe" de Estado "muy coordinado entre el Congreso más la Fuerza Armada y las manifestaciones" callejeras en contra del Gobierno y convocadas por los jefes militares, afirmó.

El objetivo de Honduras ayer en la OEA era lograr la aplicación de la Carta Democrática Interamericana para "devolver la tranquilidad, la estabilidad y el imperio de las leyes y de las instituciones" a Honduras, en palabras de Sosa.

La resolución aprobada expresa la "preocupación" del Consejo Permanente de la OEA "por que los recientes acontecimientos en Honduras puedan poner en riesgo su proceso político institucional democrático y el ejercicio legítimo del poder".

Sin embargo, no recoge la propuesta que había hecho Honduras en su propio proyecto, en el que citaba la preocupación de los países miembros del organismo interamericano por "el enfrentamiento que los titulares de varias instituciones del Estado hondureño mantienen actualmente contra el presidente constitucional", Manuel Zelaya.

El texto final aprobado por los restantes 33 países miembros de la OEA "acoge el pedido del Gobierno constitucional y democrático de Honduras de que preste su apoyo para preservar y fortalecer la institucionalidad democrática del país, dentro del marco del Estado de derecho".

El Consejo Permanente también hizo un llamamiento a "todos los actores políticos y sociales para que sus acciones se enmarquen en el respeto al Estado de derecho, con el fin de evitar la ruptura del orden constitucional y de la paz social".

Por último, instó al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, que constituya con carácter urgente una comisión especial que visite Honduras para "hacer un análisis de los hechos".

La misión especial del organismo interamericano deberá, además, "contribuir a un diálogo nacional amplio" con el fin de promover soluciones democráticas a la situación actual de Honduras.

El secretario general de la OEA, quien tiene que formar la comisión especial de acuerdo con la resolución, se encuentra actualmente en México, pero ha estado al tanto de las deliberaciones del Consejo Permanente, señalaron fuentes diplomáticas.

La composición de la misión aún no está decidida, pero podría tener características similares a la que se conformó el año pasado por el conflicto colombo-ecuatoriano y que estuvo encabezada por Insulza y miembros de la Secretaría General, así como por varios embajadores de la OEA.