La bolsa española cerró el jueves a su nivel más bajo desde el 22 de julio pasado, al aumentar los temores por la salud de la economía y las finanzas públicas del país, lo que provocó que el Ibex-35 registrara un recorte de casi el 6 por ciento y se disparara el coste de la deuda pública.

En términos porcentuales, el selectivo español no caía tanto desde el 6 de noviembre de 2008, cuando bajó un 6,27 por ciento.

"La bajada ha sido provocada por el riesgo país. Ha habido rotación de carteras y salida de mercados periféricos como España", dijo Alberto Castillo, analista de Capital Bolsa.

El Ibex-35 cayó un 5,94 por ciento, a 10.241,7 puntos, mientras en Europa las caídas eran más moderadas, con un retroceso del 2,75 por ciento en el índice paneuropeo de acciones líderes FTSEurofirst 300.

El índice general de la Bolsa de Madrid cayó un 6,08 por ciento, a 1.064,09 puntos.

"Las ventas en España se iniciaron ayer (miércoles) con un claro protagonista en la deuda, y hoy se trasladó a la renta variable", dijo un operador del parqué madrileño.

La preocupación por los diferenciales de riesgo país también empujaron al alza los spread de la deuda de España, Grecia y Portugal respecto al bono alemán. El diferencial español subió hasta los 96,4 puntos.

El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, señaló que muchos países de la eurozona tienen grandes, acusados y crecientes desequilibrios fiscales, avivando las tensiones respecto a la salud presupuestaria de Grecia, España y Portugal.

A la tendencia bajista se sumaron malas noticias sobre el paro en Estados Unidos que trajeron temores renovados sobre la salud de la recuperación económica.

En este contexto, los 35 valores del Ibex cotizaron con bajas, con pérdidas especialmente pronunciadas entre los grandes bancos y las constructoras.

BBVA se dejó un 7,54 por ciento mientras que su rival Santander cayó un 9,40 por ciento pese a anunciar unos resultados de 2009 en línea con las expectativas de los expertos.

Los temores por la situación de la economía española y el peso de la deuda de las constructoras convertía a estos valores en algunos de los mayores perdedores de la jornada.

Ferrovial fue el valor que más cayó del Ibex, un 11,34 por ciento, mientras que hubo retrocesos del 9,46 por ciento en OHL, del 6,64 por ciento en Abertis, del 5,41 por ciento en ACS y del 6,09 por ciento en Acciona.

"El coste del crédito se eleva en esta situaciones y esto penaliza particularmente a las empresas con más endeudamiento", dijo un operador.

"Todo lo que huela a deuda ahora mismo se vende sin mirar el precio. Es un 'sell off' en toda regla", agregó un analista.

Entre los grandes valores al margen de los bancos, Telefónica contribuyó al descenso, aunque por debajo de la media, al recortar precio en un 3,44 por ciento. Iberdrola y Repsol perdieron un 4,71 y un 3,55 por ciento, respectivamente.

Los temores por la deuda también incidieron negativamente en los títulos de SOS, según expertos. Las acciones del grupo de alimentación fueron las que más cayeron fuera del selectivo, un 13 por ciento.