La Bolsa española cerró el lunes con baja, en contra de la dirección de las principales plazas europeas lastrada por Banco de Santander que sorprendió al mercado al anunciar una ampliación de capital.

El banco cántabro indicó que llevará a cabo una ampliación de capital de 7.200 millones de euros para reforzar su base de capital.

Expertos dijeron que la iniciativa del banco presidido por Emilio Botín tendrá un efecto inicial bajista sobre sus títulos, pero a más largo plazo tendrá una incidencia positiva.

"Al principio pesará sobre sus acciones con baja porque es una dilución de su capital y con el descuento que va a plantear tiene que pesar en el mercado", dijo un operador.

"Santander ha hecho algo bastante lógico y a más largo plazo se verá como bueno porque lo hace a través del mercado como siempre se ha hecho en lugar de acudir a otros procedimientos y esto es bueno en sí", agregó el operador.

Renta 4, que consideró positivo el objetivo de reforzar el core capital del banco, dijo que "la noticia en sí misma tiene una lectura negativa, porque el equipo gestor del banco siempre ha reiterado que no necesitaba reforzar capital".

Los analistas de Renta 4 estiman que la decisión "podría extender el miedo de que le sigan otros bancos filiales, por lo que el impacto será negativo en todo el sector".

Las acciones de Santander cerraron con baja del 5,04 por ciento a 7,92 euros.

El descenso del primer banco español fue acusado por el resto del sector. Su principal rival, BBVA cayó un 1,98 por ciento a 9,39 euros. El segundo banco español dijo que no tiene que reforzar su capital tras la ampliación anunciada por Santander.

Bankinter fue otro de los bancos afectados, con un descenso próximo al cuatro por ciento.

Sabadell cayó un 1,09 por ciento a 5,42 euros.

Al margen del sector bancario, en el mercado predominaban las alzas después de que China anunciase un paquete de estímulo económico de 600.000 millones de dólares.

El paquete provocó un impulso de los grupos de materias primas que, en España, se materializó a través de Acerinox, cuyas acciones subieron más de un cinco por ciento.

Los pesos pesados Telefónica y Repsol no pudieron compensar las caídas de los dos grandes bancos pese a sus alzas del 0,93 y 1,34 por ciento, respectivamente. La operadora fue objeto de una mejora de recomendación por parte de JP Morgan.

El Ibex-35 cayó un 053 por ciento a 9.293,8 puntos y el índice general de la Bolsa de Madrid perdió un 0,66 por ciento a 995,31 unidades.