Este artículo se publicó hace 15 años.
Impuesto a bebidas endulzadas combatiría obesidad
Si Barry Popkin pudiera elegir, crearíaun impuesto a las bebidas endulzadas del mismo modo que se pagapor los cigarrillos y el valor crecería hasta que las sociedadeslas abandonen y eliminen una de las causas del aumento de peso.
Popkin, un experto en nutrición que ha asesorado alGobierno estadounidense y a políticos de todo el mundo, diceque la epidemia de la obesidad y de subir de peso que arrasa entodo el mundo podría ser frenada dramáticamente si la gentecorrige el mantra "eres lo que comes" y le añade "eres lo quetomas".
Reavivar el gusto por el agua podría ayudar a reducir entre300 y 600 calorías por día en la dieta de un estadounidense omexicano promedio y casi tanto en la ingesta diaria de muchoseuropeos, sostuvo.
"Dependiendo del país en donde vivas, ahora tenemos entre el10 y el 25 por ciento de todas las calorías consumidas en bebidasendulzadas o calóricas", dijo a Reuters Popkin, profesor denutrición de la Universida de Carolina del Norte durante unavisita a Europa.
"Este cambio ha sido fenomenal, sobre todo en los últimos25 años. No es la única causa del problema mundial de laobesidad, pero es el factor que podemos cambiar con el mínimoperjuicio para la dieta diaria de la población", agregó.
Los datos acerca del aumento de peso y los crecientesniveles de obesidad dejan poco espacio a las dudas: el problemaestá amenazando con desbordar a los sistemas de salud y lospresupuestos de los gobiernos de todo el mundo.
Un reporte publicado por la OCDE el miércoles dijo que unode cada tres adultos estadounidenses es obeso, mientras que unestudio de Popkin realizado en China en el 2008 sugirió que losniveles de obesidad allí también están aumentando rápidamente,con más de un cuarto de la población con sobrepeso u obesa.
El número de pacientes con diabetes -una de las principalesenfermedades crónicas provocadas por el exceso de peso- ya estáalcanzando niveles epidémicos, con un estimado de 180 millonesde personas diabéticas en todo el mundo.
Popkin reconoce que ahora hay alrededor de 25 países dondemás de la mitad de la población adulta tiene sobrepeso o esobesa y en muchos países ricos, al igual que en naciones deingresos medios como Sudáfrica, México y Egipto, la tasaalcanza entre el 60 y el 70 por ciento.
Popkin, que ha estudiado los hábitos de alimentación envarios países de Europa, Asia, Oriente Medio y Estados Unidos,dice que el paso del agua a bebidas endulzadas pudo haberprovocado entre un tercio y dos tercios del aumento de peso enlos últimos 30 años.
El experto reconoce que podría llevar tiempo -probablementeuna década- cambiar el gusto por las bebidas endulzadas, perodijo que los políticos deben tomar como ejemplo al tabaco yusar los impuestos como un arma.
"Me gustaría un sistema en el cual las bebidas endulzadassean las que más pagan impuestos, las bebidas dietéticas menos yel agua ningún impuesto", dijo Popkin. "Si ese impuesto elevarael costo en un 15 o 20 por ciento, tendría un efectosignificativo en el abandono de las bebidas endulzadas", apuntó.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.