Mientras PP y PSOE se atizan con descaro utilizando la corrupción del ladrillo (o la de los trajes, o la de los tratos de favor), Izquierda Unida se mantiene incólume. Quieta como un tancredo. Casi como el que oye llover. Eso, las febriles acusaciones del y tú más, no interesan a los ciudadanos, remachan en la federación. No vienen al caso a justo diez días de unas elecciones europeas. 'Me preocupa que al final distraigamos a los ciudadanos de lo fundamental, que son las propuestas', subrayó ayer el candidato de IU-ICV, Willy Meyer, primero en San Sebastián y ya por la tarde en Bilbao. En la comunidad vecina, en Cantabria, el coordinador general, Cayo Lara, incidía en un mensaje idéntico: más ideas para salir de la crisis en Europa y que los cabezas de lista de PSOE y PP, Juan Fernando López Aguilar y Jaime Mayor Oreja, 'no caigan en hablar sólo de corrupción'.

Meyer, en todo caso, apuntó las razones: la 'mala gestión' de los dos grandes partidos en los municipios, la pasión por un modelo de crecimiento 'basado en la especulación y la construcción'. El desenlace es una 'corrupción transversal' que afecta a PSOE y PP. El último, el presunto 'nepotismo' de Manuel Chaves cuando lideraba la Junta de Andalucía.

De rondón, el candidato recriminó al presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, que acudiera el domingo al mitin de Dos Hermanas (Sevilla) en un Falcon militar. 'No he venido aquí en ningún avión de las Fuerzas Armadas, pero si el Ejército nos lo ofreciera a todos los partidos por igual, no lo aceptaría'.

Nueve medidas

Cumplido el guión de la actualidad, Meyer desgranó el 'maratón de propuestas' para la UE, en consonancia con el ultimátum (o eso pretendía) lanzado el martes a Aguilar y Mayor. El cabeza de lista retó a Zapatero a dar a conocer 'ya' su programa de acción para la Presidencia de la Unión, que España asumirá en el primer semestre de 2010.

IU exige imprimir un 'nuevo rumbo' a la UE, sustituir la flexiseguridad por un 'empleo estable y con derechos', reemplazar la directiva Bol-kestein por unos servicios públicos de calidad, rescatar los sectores estratégicos de la economía, promover el comercio justo, reducir el gasto militar, otorgar plenos derechos a los inmigrantes, parar la renovación de José Manuel Durao Barroso e incentivar la 'credibilidad' de los ciudadanos en una Unión tan agria que ya es puro 'muermo'. Van nueve medidas.

Algo más: es 'deplorable' que Zapatero se haya sacado un gemelo: el 'ciudadano Zapatero' de izquierdas y el 'presidente Zapatero' que no cumple, dijo Meyer. Es lo que se llama 'esquizofrenia'.