Por Sachi Izumi

El fabricante japonés de componentes electrónicos TDK anunció el jueves que registrará una pérdida récord este año fiscal por una caída en los pedidos y la apreciación del yen, por lo que decidió cerrar fábricas y eliminar empleos en el extranjero para ahorrar costes.

TDK, que fabrica componentes para ordenadores, móviles, coches y televisores de pantalla plana, se suma a una serie de compañías que recortan la producción y despiden personal para compensar los efectos de la peor crisis global en décadas.

"Nuestros clientes están llenos de inventarios porque caen las ventas y, honestamente, no podemos predecir cuándo mejorará la situación", dijo el presidente de TDK, Takehiro Kamigama, en una sesión informativa.

"Las ventas de componentes para móviles y automóviles están especialmente débiles y no vemos ningún producto que pueda tirar del negocio", añadió.

TDK estimó una pérdida neta de 28.000 millones de yenes (unos 221 millones de euros), la mayor de su historia.

"El pronóstico revisado es peor de lo esperado", dijo Akihiko Uchino, analista de Mitsubishi UFJ Securities.

Previamente, había augurado un beneficio neto de 25.000 millones de yenes, que fue revisado desde un objetivo de 55.500 millones de yenes en octubre, mientras que 15 analistas, de media, esperaban una ganancia de 7.900 millones de yenes, según Reuters Estimates.

TDK dijo que cerrará cuatro centros de fabricación y recortará más de 8.000 empleos en el extranjero, más de un 13 por ciento de su plantilla.

La compañía ya ha recortado unos 17.000 empleos en China en el último semestre.

TDK dijo que probablemente sufra una pérdida operativa de 26.000 millones de yenes, frente a una estimación previa de ganancias de 35.000 millones de yenes y a una previsión media de los analistas de ganancias de 12.000 millones de yenes.