Jove niega que sobrevalorara Fadesa al venderla

El expresidente de Fadesa, Manuel Jove, negó ayer ante el juez que los activos de la inmobiliaria fuesen sobrevalorados para su venta a Martinsa, propiedad de Fernando Martín. En su declaración, ante el titular del Juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña, Jove precisó que él no era el encargado de proporcionar los datos para valorar la compañía, labor que correspondía a las "18 delegaciones de Fadesa en todo el mundo", y defendió el procedimiento interno utilizado, que incluía la categoría de suelo "preurbanizable", figura que no contempla, sin embargo, la legislación vigente.

"Yo no fui a buscar comprador", se defendió Jove en la primera sesión del juicio por la demanda de responsabilidad social interpuesta por Fernando Martín, que le reclama una indemnización de 1.576 millones "por la sobrevaloración de activos". En concreto, el presidente de Martinsa Fadesa acusa a la anterior directiva de sobrevalorar al menos 37 activos de la firma en 2006, año en que Martinsa compró por 4.045 millones la empresa gallega.

Tanto Jove como el que fue consejero delegado de Fadesa, Antonio de la Morena, arguyeron ante el juez que la información facilitada a la consultora CB Richard Ellis, encargada de realizar la auditoría de Fadesa antes de su venta, "fue la correcta en todo momento". El exconsejero delegado de la inmobiliario ironizó, incluso, con la dificultad de engañar a Martinsa en el proceso de compraventa, al ser una firma que "se dedicaba a la gestión de suelo".

Pero Jove fue más allá en su declaración al acusar a Martín de haberlo "amenazado" con interponer una demanda si no accedía a comprar activos de la nueva Martinsa Fadesa por valor de 200 millones. "A lo mejor hice mal, pero pagué para no verme en una situación como esta", añadió. Según la versión del empresario, este nuevo acuerdo se cerró en 2007, meses después de la venta de Fadesa, e incluía la adquisición de hoteles en Galicia y Catalunya, así como de terrenos. Este documento preveía asimismo un pacto de "no agresión", por el que Martinsa Fadesa renunciaba a reclamar responsabilidades. Fernando Martín no tardó en negar dichas acusaciones; calificó de "rotundamente falso" que condicionara la interposición de una demanda a la compra de activos. El presidente de Martinsa, que no será llamado a declarar, lamentó no poder desmentirlo "en primera persona" ante el juez.