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El juez no ve delito enla liberación de Bushi

El auto apunta, sin embargo, que la culpa fue de la Policía

Ó. L. F.

La liberación por error el pasado 31 de marzo de Astrit Bushi, el delincuente albanés que fue detenido por la brutal agresión al productor de televisión José Luis Moreno, aún colea.

Ayer, el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Alcobendas (Madrid) decidió sobreseer las diligencias incoadas como consecuencia de la irregular puesta en libertad de Bushi, 'al no apreciar delito en la actuación de los policías nacionales encargados de la vigilancia en sede judicial del citado ciudadano albanés', según una nota emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).

El juez apunta, no obstante, a la Policía como última responsable del error, al recalcar que los agentes que custodiaban al delincuente mantuvieron 'entre ellos una mera comunicación verbal que tuvo como consecuencia directa la irregular puesta en libertad del individuo que custodiaban'. El auto, incluso, sugiere al Ministerio del Interior que sancione disciplinariamente a dichos policías por 'infidelidad en la custodia de presos'.

La decisión de ayer es el último episodio del cruce de acusaciones que, desde la puesta en libertad por error de Bushi, han mantenido los jueces e Interior. El presidente del TSJM, Francisco Javier Vieira, anunció que exculpaba al juez Javier Martínez Borregón, que fue quien ordenó la puesta en libertad de Bushi. Vieira apuntó implícitamente a la Policía como responsable del error. Días después, el departamento de Alfredo Pérez Rubalcaba señaló 'anomalías' en el juzgado como la causa final de la huida.

Entre tanto, Interior y el Consejo General del Poder Judicial abrieron sendas investigaciones internas para determinar la responsabilidad de los agentes y del juez, respectivamente. El órgano de Gobierno de los jueces hizo público el 9 de junio su decisión de cerrar las diligencias informativas, 'al no apreciar la existencia de responsabilidad disciplinaria en la actuación' del magistrado. Sin embargo, la información reservada que inició la Dirección General de la Policía, y en la que declararon hasta nueve agentes, ha concluido con la apertura de un expediente sancionador a tres policías por falta leve. Fuentes sindicales apuntan a que finalmente será archivada.

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