El juicio a dos presuntos miembros del aparato de extorsión de ETA, Aitor Cortázar García y Zígor Merodio Larraona, se abrió hoy en el Tribunal Especial de lo Criminal de París, en medio de fuertes medidas de seguridad.

A preguntas de la presidencia de la corte, integrada exclusivamente por magistrados profesionales, Cortázar y Merodio confirmaron su identidad, lugar y fecha de nacimiento, pero advirtieron de que no responderían a más preguntas.

Una veintena de allegados de los dos acusados estaba presente en la sala donde se desarrolla la vista, que, según el calendario provisional establecido por el presidente del tribunal, Francis Debons, concluirá el miércoles o el jueves.

Los dos presuntos etarras están imputados por diversos cargos, en particular la extorsión de empresarios vascos y navarros para el cobro del "impuesto revolucionario".

Cortázar, de 38 años, también está acusado de causar heridas a tres agentes municipales, cuando en un coche robado intentó escapar a un control policial casual que condujo a su arresto, el 4 de abril de 2003, a las afueras de Burdeos (suroeste).

Merodio, de 33 años, comparte con Cortázar imputaciones como asociación de malhechores con fines terroristas, receptación de vehículos robados, tenencia ilícita y transporte de armas o documentación falsa, y, además, se le acusa del robo a mano armada de un coche y del secuestro de una mujer para utilizarla como rehén en su fuga.

Los investigadores han establecido que Merodio y otro etarra no identificado estaban en el mismo coche que Cortázar, cuando se toparon con el citado control cerca de Burdeos, en 2003.

Cortázar fue capturado, pero los otros dos lograron escapar y en su huida sustrajeron un coche a punta de pistola antes de abandonarlo unos kilómetros más tarde para cambiarlo por el de una mujer, a la que obligaron a conducirlos hasta Bayona (País Vasco francés), donde se les perdió la pista.

Esta mujer, así como uno de los agentes municipales que resultó herido, se han constituido como acusación particular en la causa y acudieron hoy a la apertura del juicio.

Merodio fue arrestado finalmente el 1 de junio de 2006 en Burdeos, en un control policial junto a otro presunto integrante del aparato financiero de la banda, y cuatro meses después fue condenado en otra causa por el Tribunal Correccional de París a dos años de cárcel y a la prohibición definitiva de estancia en Francia por su pertenencia a ETA.

Los investigadores encuadran a Cortázar y Merodio en el aparato de extorsión de ETA, "Gezi".