El BBVA aprobó hoy en su Junta General Ordinaria de Accionistas el reparto de un dividendo complementario de 0,15 euros por título con cargo a los resultados de 2009, lo que eleva la retribución total al accionista a 0,42 euros.

Este dividendo equivale al 30 por ciento del beneficio atribuido sin extraordinarios del grupo, que ascendió el año pasado a 5.260 millones de euros, explicó hoy el presidente del Grupo, Francisco González.

Los asistentes a la Junta, celebrada como cada año en el Palacio Euskalduna de Bilbao, aprobaron por mayoría absoluta los seis puntos del orden del Día, entre ellos la reelección de González para otros tres años de mandato, como ya se había anunciado, que fue apoyada por el 93,47% de los que emitieron su voto.

También ratificaron, con el 95,25% de los votos a favor, a Ángel Cano como consejero delegado, cargo al que accedió el pasado mes de septiembre, tras la marcha de José Ignacio Goirigolzarri.

También dieron su visto bueno a la reelección de los consejeros independientes Ramón Bustamante e Ignacio Ferrero.

Asimismo, aprobaron las cuentas anuales y el informe de gestión del grupo, así como el programa de retribución variable plurianual en acciones para los ejercicios 2010 y 2011, a lo que accedieron el 94,53% de los accionistas.

El plan suprime las indemnizaciones por cese para los consejeros ejecutivos, reduce sus obligaciones en materia de pensiones y congela su salario fijo, al tiempo que recorta las retribuciones variables y adapta sus sueldos "al actual entorno de crisis internacional".

Se eliminan, asimismo, las tres posibles indemnizaciones para consejeros ejecutivos que existían -la del presidente (de 94 millones de euros), la del consejero delegado (de 69 millones) y la del secretario general (de 15 millones), lo que permitirá al BBA ahorrar 178 millones de euros.

Además, el Comité de dirección del BBVA se ha bajado casi un 14,5 por ciento su retribución en 2009 con respecto al año anterior, ya que -pese a contar con un miembro más- sus salarios fijos han pasado de 6,8 millones en 2008 a 6,2 millones el pasado año, mientras que los variables han bajado de 13,3 a 10,8 millones.

Desde el cierre del pasado año no existen compromisos de pago por indemnizaciones a los consejeros ejecutivos por ceses sin justificar, explica la entidad.

En el caso de Cano, que accedió al cargo en septiembre sustituyendo a Goirigolzarri, se mantiene el esquema de jubilación anticipada estándar del banco (un 75% del salario 'pensionable' antes de cumplir 55 años y un 85% después de esa edad).

Los accionistas del BBVA también aprobaron la gestión del Consejo de Administración del Grupo y autorizaron a la entidad para la adquisición de acciones propias, directamente o a través de las sociedades del Grupo.