Este artículo se publicó hace 15 años.
El jurado destaca la elegancia y la intensidad de "Las huellas herradas"
El jurado del Premio Logroño de Novela escogió como ganadora a "Las huellas erradas", de Eduardo Iriarte, por su elegancia poética, combinada con un ritmo intenso que hace que no se pierda el interés a lo largo de sus páginas.
Así lo han explicado hoy los miembros del jurado este premio literario, que fue entregado anoche al autor navarro, quien no ha podido comparecer al tener que regresar a Barcelona, donde reside.
El presidente del jurado, José Manuel Caballero Bonald, ha admitido que "la primera vez que leí esta novela, me gustó menos, pero luego la releí y despertó en mí un interés admirable".
También ha ironizado sobre el título de la obra "que no es ningún descubrimiento" y ha explicado que "el propio autor pensaba titularla Simón M., pero ha cambiado".
Pero el poeta andaluz ha recalcado que a lo largo de las páginas de "Las huellas erradas" se percibe que su autor "ha traducido a grandes poetas, mantiene un fraseo elegante, un estilo muy cuidado y describe momentos de una gran belleza plástica", motivos por los que ha justificado el premio.
El novelista madrileño Martín Casariego, ganador de la anterior edición de este premio ha incidido en que Iriarte "ha conseguido mantener el ritmo a lo largo de todo el libro y que nunca se pierda el interés".
Sobre su experiencia personal cuando obtuvo este galardón ha afirmado que su ganador de 2009 "va a comprobar que la novela va a estar bien editada", por Algaida, "va a ser bien distribuida y va a estar mucho tiempo en las librerías" ha asegurado, aunque ha admitido que no dispone de datos sobre las ventas.
"Creo que los escritores debemos despreocuparnos un poco de eso, escribir lo mejor posible y contribuir a que se venda mediante la promoción", ha explicado el autor madrileño, quien ya trabaja en una nueva novela, que será la continuación de "Qué te voy a contar" publicada hace dos décadas.
Otro de los miembros del jurado, el vallisoletano Gustavo Martín Garzo, ha destacado la iniciativa de este premio literario de complementar la entrega, en un acto oficial, con un ciclo de charlas que los miembros de jurado ofrecerán a alumnos de primaria y secundaria.
El autor castellano, que publicará la próximas semana "La carta cerrada", ha afirmado que la novela ganadora "tiene momentos desgarradores, dentro de un mundo sórdido como el de la guerra", y ha afirmado que, en su opinión, "estamos en un buen momento para la literatura, hay buenos escritores y libertad".
Eugenia Rico, por su parte, ha llamado la atención sobre la "convivencia" en la literatura actual de "un gran momento de creación con la idea de que los editores no pueden apoyar lo bueno porque no es comercial" aunque ella considera que "el público demanda obras inteligentes"
Y, en ese sentido, José María Merino ha aludido al "principal peligro" de la literatura actual "que es el que han vuelto los libros de caballería, de puro entretenimiento banal" en alusión a betsellers como los da la saga "Milenium".
Ha lanzado una propuesta "para ayudar a los autores y a la literatura" basada en que los libros mantengan siempre sus derechos de autor o al menos un porcentaje" porque "la propiedad intelectual es la única que prescribe" y "con esas pequeñas cantidades se podrían acometer diferentes proyecto y evitar que los escritores tengan que vivir del mecenazgo".
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