Una manifestante contraria a la ampliación del aeropuerto de Heathrow arrojó el viernes un líquido verde al secretario de Negocios británico, Peter Mandelson, cuando llegaba a una reunión en el centro de Londres para promover la reducción de las emisiones de carbono.

Las imágenes en directo de la televisión mostraron a la mujer en el momento en que se aproximaban cuando se aproximó a Mandelson poco después de que bajara de su coche y lanzándole a la cara el líquido verde que llevaba en un vaso.

La manifestante, Deila Deen, de 29 años, del grupo ecologista Plane Stupid, dijo que se estaba manifestando por lo que calificó como políticas hipócritas del Gobierno sobre cambio climático.

"Estamos comprometidos a una reducción del 80 por ciento. Si construimos una tercera pista (en Heathrow) significará que todas las otras industrias tienen que reducir sus emisiones de carbono a cero. ¿Cómo es eso posible? Eso no es posible", expresó en declaraciones a la BBC tras el incidente.

Mandelson participaba en una conferencia para promover las inversiones en industrias ecológicas que puedan permitir la creación de cientos de miles de empleos.

En declaraciones a periodistas tras el evento y después de limpiarse, Mandelson dijo que no sabía qué era lo que pretendía la mujer.

"Estaba tan ocupada arrojando lo que parecía una especie de sopa verde o algo en mi cara que ni siquiera me dijo de qué iba la protesta", dijo a Sky. "Pero como ustedes pueden ver no era pintura y aquí estoy, intacto", agregó.

"Estoy vivo y bien y hablando sobre la economía de baja emisión de carbono que vamos a crear y las enormes oportunidades de negocios y de creación de empleo que eso traerá, por lo que creo que lo que necesitamos es respaldar los asuntos positivos", observó.

El Gobierno aprobó planes en enero para la ampliación del aeropuerto de Heathrow con la construcción de una tercera pista y otro terminal, lo que enfureció a ecologistas.

El incidente del viernes fue la segunda protesta de Plane Stupid en esta semana. El martes, siete de sus activistas fueron arrestados después de que violaran un perímetro del aeropuerto Aberdeen causando el retraso de algunos vuelos.

El año pasado, protagonizaron varias manifestaciones, incluyendo una subida al techo del Parlamento británico.