Maliki condena el asesinato del representante en Nayaf de Muqtada al Sadr

El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, condenó hoy como una "acción brutal" el asesinato del representante del clérigo chií Muqtada al Sadr en Nayaf, Riad al Nuri, tras lo cual fue impuesto el toque de queda en la ciudad.

Según un comunicado difundido por la oficina de Maliki, el crimen es "un intento de eliminar a las personalidades religiosas y nacionales y de incitar a la revuelta" entre las diferentes facciones iraquíes.

Maliki anunció que ha ordenado la investigación del asesinato de Nuri, que fue disparado por desconocidos cuando regresaba a su casa en Nayaf después de la oración del viernes.

Un portavoz "sadrista", Haider Nateq, había acusado al Gobierno de Maliki de estar detrás del asesinato poco después de cometerse el atentado.

Por su parte, Muqtada al Sadr instó a sus seguidores a mantener la calma y ordenó una investigación propia del suceso, según fuentes de su oficina en Nayaf.

Sadr también pidió a sus delegados que preparen sus oficinas para recibir las condolencias en Bagdad, Nayaf, y las ciudades de Qom, en Irán, y Damasco (Siria).