"Lo que más me excita es dirigir programas"

La periodista Samanta Villar entiende que la labor del equipo de su programa, Conexión Samanta, es ser "detectores de la realidad". Con ese objetivo estrena la tercera temporada de su espacio el próximo viernes en Cuatro a las 00.00 horas, de la mano del reportaje Pequeña princesa.

En esta primera entrega, Villar mostrará desde una "óptica crítica" los entresijos de un concurso de belleza infantil en República Dominica en el que compiten niñas menores de 10 años. "Estos concursos generan un debate sobre si es apropiado para su edad el hecho de pasear por un pasarela, adoptar según qué poses y la sexualización de la infancia", relata Villar a Público.

"Creo que mi futuro no está en pantalla", asegura la periodista

Esta es sólo una de las historias que abordará en esta nueva etapa, en la que también se sumergirá en la realidad de las maras en El Salvador. "A priori piensas que te va a impactar la situación de peligro, pero lo que más me impresionó fue la fuerza de voluntad de algunos pandilleros para reconducir sus vidas", reconoce esta periodista. Precisamente este reportaje ha sido el más duro de rodar porque en ese territorio "un paso en falso puede ser fatal", por lo que tuvieron "muchísimo cuidado" de que nadie pudiera percibir la cámara como "una agresión".

Conexión Samanta trata de encontrar "historias extraordinarias" y, en un momento en el que "la televisión está derivando en entretenimiento" por "la lógica empresarial", su equipo y ella tratan de dar a su espacio "un enfoque informativo". "Combinamos el entretenimiento con la información y trabajamos con el lenguaje documental", argumenta.

La primera entrega analizará un concurso de belleza infantil

Respecto a las voces que critican la mezcla de información y espectáculo en su formato, Villar destaca que en un mundo marcado por el entretenimiento intentan explicar relatos "interesantes" y que, ante la sobreabundancia de información, "la única manera en que la gente reacciona es con la emoción". "Buscamos reflejar la emoción detrás de la información", resume.

Con tantos reportajes a la espalda, Villar ha acumulado toda clase de experiencias, incluso la de verse inmersa en un proceso judicial por el robo de unos hierros durante un reportaje para el programa 21 días. Sin embargo, "el fiscal no tenía pruebas para acusar" y el proceso "quedó en nada".

De momento, el futuro inmediato de Villar está asociado a Conexión Samanta y, aunque no se plantea sus próximos pasos "a largo plazo", no descarta alejarse de las cámaras. "A mí me da que mi futuro no está en pantalla, no voy a estar haciendo pantalla toda la vida. Lo que más me excita intelectualmente es dirigir programas o crear nuevos formatos", remata.