Público
Público

El mediador entre Iberia y sindicatos inicia su ronda de contactos con UGT

Gregorio Tudela se reúne esta mañana con representantes del sector aéreo de UGT para acercar posturas. IAG tiene claro que tumbará cualquier propuesta que 'hipoteque' su capacidad de gestión

AGENCIAS

La negociación entre la dirección de Iberia y los sindicatos sigue enquistada y sin visos de que la aerolínea ceda en las medidas contempladas en su plan de reestructuración, a pesar de las sucesivas peticiones por parte del Gobierno para que las partes acerquen posturas y lleguen a un acuerdo.

En ese sentido se orienta la reunión de este lunes entre el mediador designado por el Gobierno, Gregorio Tudela, y el sindicato UGT en lo que será la primera ronda de contactos con las partes. La cita tiene lugar en la Universidad Autónoma de Madrid, donde éste es profesor.

Ya este sábado, Tudela se entrevistó con el jefe de la sección sindical del Sepla (Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas) de Iberia, Justo Peral, según anunció este último, quien también aseguró que ha podido comprobar 'su gran preocupación sobre la grave repercusión que para la economía española y para la marca España tendría la reducción de Iberia, su transformación en compañía low cost y la pérdida del liderazgo en las rutas a Latinoamérica'.

'Me ha dejado muy claro que tanto él como el Gobierno consideran a Iberia una compañía estratégica para España y que en ningún caso se debe permitir su desmantelamiento', concluye.

Sin embargo, IAG, el holding constituido a raíz de la fusión entre la compañía española y la aerolínea británica British Airways, no está dispuesta a aceptar ningún acuerdo que socave capacidad de gestión en Iberia y se salga de las tres líneas rojas que se ha marcado para seguir adelante con el plan de reestructuración de Iberia, un ajuste que implica un ERE para 3.807 empleos y una reducción de capacidad del 15%, con una disminución de 25 aviones en su flota (20 aviones menos en corto y medio radio y cinco en larga distancia).

Los otros dos ejes de su estrategia en los que el grupo no piensa ceder son el desarrollo 'sin restricciones' de su filial Express, principal escollo que enfrenta a Iberia con sus pilotos, y en su apuesta por el control de Vueling para operar a conveniencia en el mercado español.

'Si se llega a un acuerdo que no respete estas tres líneas rojas, IAG lo tumbará en su consejo o, si no, en la junta de accionistas. La compañía no va a ceder en esto', indicaron fuentes al tanto de la negociación.

El consejo de administración del holding será el próximo 28 de febrero, día en que el grupo hará públicas sus cuentas anuales. IAG sólo vería con buenos ojos un acuerdo con 'ciertas concesiones laborales' si éstas 'no hipotecan la estrategia de desarrollo marcada por la compañía'.

Iberia ya ha dicho a los sindicatos que si no hay acuerdo para el 14 de marzo comenzará a aplicar el ERE anunciado para el 19% de la plantilla. 

En el caso de que la mediación fracase y se acuda a un nuevo arbitraje obligatorio, las mismas fuentes advirtieron del riesgo que supondría acudir a un tercer laudo, después de que los dos ya dictados ante el lanzamiento de Express hayan sido recurridos por la aerolínea española.

'Si se repite el laudo, IAG reduciría la operativa de Iberia', advirtieron, para apuntar que la compañía es 'soberana' en su capacidad de gestión. 'En España se está intentando cerrar un acuerdo para presentarlo al consejo del grupo como una política de hechos consumados', criticaron. 

Actualmente, la compañía española pierde al día 1,7 millones de euros, según IAG, lo que contribuye a deteriorar la llamada 'caja', que supera ligeramente los 1.000 millones de euros. 'Dicha caja no se puede utilizar para financiar los planes de pensiones de British Airways', recuerdan las mismas fuentes. Desde 2008 hasta 2012, Iberia ha usado su caja para prejubilaciones, inversión en nuevos aviones o el pago de deuda, aunque según fuentes sindicales, la renovación de flota no ha pasado por Iberia, que ve como día a día va restando aviones que nunca se reponen mientras British adquiere nuevas naves y rutas que Iberia ha dejado de operar por sus escasa rentabilidad a ojos de IAG.

En cuanto a la tercera línea roja, IAG quiere integrar Vueling en el grupo como un activo más, para lo que lanzó en noviembre una OPA a un precio de 7 euros por acción para hacerse con el 54,15% del capital social de la compañía que preside Josép Piqué que no controla Iberia.

La oferta, sujeta a la condición de aceptación mínima del 90% de las acciones de Vueling con derecho a voto, estaría por debajo del precio de mercado, según varios fondos accionistas de la catalana. La compañía está en su mejor momento, tras cerrar 2012 con récord de pasajeros (14,8 millones de viajeros), un 20% más.

Al respecto, las mismas fuentes indicaron que el consejo de IAG, que ve en Vueling 'un activo estratégico' para el mercado nacional, podría subir el precio por Vueling.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias