Este artículo se publicó hace 15 años.
Merkel presiona al G-20 para que alcance resultados tangibles
La próxima cumbre del Grupo de los 20 debe producir resultados concretos que vayan más allá de los acuerdos alcanzados en la anterior reunión de abril, dijo el viernes la canciller alemana, Angela Merkel.
En la cumbre de Pittsburgh, que será la tercera que celebra el G-20 tras la caída de Lehman Brothers hace un año, los líderes analizarán distintos planes para endurecer las regulaciones financieras y discutirán los pasos a seguir, ahora que la economía mundial muestra señales de recuperación.
"Es muy importante que tengamos resultados concretos que vayan más allá de lo que se acordó en Londres", afirmó Merkel en una conferencia de prensa en Berlín.
El G-20 acordó en Londres "extender la regulación y la supervisión de todas las instituciones financieras, instrumentos y mercados importantes para el sistema" y Merkel quiere ahora que los dirigentes mundiales acuerden un régimen para dar sustancia a esa promesa.
A mediados del próximo año debería haber en marcha un nuevo marco regulatorio para los mercados, sostuvo, en línea con la estrategia alemana de presionar para que haya normas más estrictas que controlen el capitalismo desenfrenado.
Los jefes de Estado son especialmente sensibles a las millonarios primas de los banqueros, ya que muchos votantes los ven como una causa de la crisis global.
Un acuerdo en este asunto interesa particularmente a Merkel, que buscará su reelección en los comicios del 27 de septiembre, a pocos días de su regreso de Pittsburgh.
Los dirigentes europeos acordaron el jueves buscar que se impongan límites a las primas bancarias durante la cumbre y dijeron que querían ver pruebas del fin de la recesión antes de retirar el gasto inyectado para apuntalar sus economías.
El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios de la Unión Europea, Joaquín Almunia, dijo que es probable que el G-20 acuerde fijar límites sobre las primas de los banqueros.
"Es posible fijar límites, condiciones. Pienso que es el resultado más probable del próximo encuentro del G-20", dijo a una radio española.
Almunia consideró además que la llamada "tasa Tobin", que busca gravar las transacciones financieras, es una excelente idea, pero que necesita ser analizada en detalle antes de que se pueda poner en práctica.
Merkel dijo el jueves que la posibilidad de un impuesto global a las transacciones financieras ha sido discutida por los líderes de la UE en un encuentro en Bruselas, agregando que la idea fue planteada por Alemania y Austria, con el apoyo de Reino Unido y Francia.
El ministro de Finanzas de Alemania, Peer Steinbrück, dijo el viernes que presionaría al G-20 para analizar la idea en la cumbre de Pittsburgh, pero que no veía un consenso sobre el tema.
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