Miles de gaditanos y de vecinos de localidades próximas se han echado a la calle para celebrar las dos fiestas gastronómicas por antonomasia del Carnaval de Cádiz: la erizada y la ostionada.

Ambas convocatorias son, junto al Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas, que empieza el próximo viernes en el Gran Teatro Falla, el pistoletazo de salida de una de las fiestas más populares de Cádiz.

Este año, como sucedió en la anterior edición, la erizada y la ostionada han coincidido en fecha aunque no en lugar de celebración.

Por un lado, la peña El Erizo, organizadora de la popularmente conocida como la erizo, ha centrado sus actos en el popular Barrio de la Via, considerado por los amantes del carnaval gaditano como la cuna de la gracia.

Los miembros de la citada peña han repartido entre los asistentes, que en años anteriores han llegado a ser más de 13.000 personas, platos de plástico con erizos de mar, además de manzanilla de Sanlúcar y cerveza bien fría.

Según los organizadores del evento, se han repartido más de 500 kilos de este molusco tan apreciado durante las vísperas de las fiestas grandes gaditanas.

Y si en el popular barrio de La Viña la erizada ha sido la protagonista, a pocos metros de allí, en la Plaza de San Antonio, ha tenido lugar la otra de las fiestas gastronómicas más relevantes: la ostionada, que también ha congregado a miles de aficionados que han degustado ansiosamente los más de mil kilos de ostiones repartidos por la Peña El Molino, organizadora del acto.