El ministro alemán de Finanzas, Peer Steinbrück, quiere obligar a Liechtenstein a asumir estándares fiscales europeos y ha asegurado que el Ecofin se ocupará del tema la próxima semana.

"Estamos ejerciendo influencia y presión a nivel europeo", afirmó el ministro en una declaraciones que publica hoy el diario Ruhr Nachrichten, de Bochum.

Si no se logran progresos en el ámbito europeo entonces, agregó Steinbrück, Alemania tomará medidas destinadas a detener la fuga de capitales hacia el principado, que de momento es el epicentro de un escándalo fiscal que estalló en este país y que ha adquirido dimensiones internacionales.

Steinbrück mencionó como posibles medidas la introducción de un impuesto a toda transferencia bancaria a un banco de Liechtenstein o someter a las entidades a reportar a las autoridades financieras ese tipo de operaciones.

Por otra parte, volvió a defender la actuación de los servicios secretos alemanes que hicieron posible destapar el escándalo mediante la compra a un informante de un DVD con datos de clientes del banco LGT que utilizaban el paraíso fiscal de Liechtenstein para evadir impuestos.

Ese procedimiento de los servicios secretos ha sido duramente criticado en Liechtenstein, donde se ha hablado de métodos criminales.

Entre algunos juristas alemanes existen dudas de que los datos del DVD puedan ser utilizados ante los tribunales, pero tanto el Gobierno como la fiscalía de Bochum, que dirige la operación, están convencidos de que el material tiene valor judicial.

En Alemania ya se habían producido 150 registros policiales y en el último informe de la fiscalía se dijo que 91 de los implicados habían confesado, mientras que 72 habían presentado denuncia contra sí mismos (figura jurídica para evitar la persecución penal).