Los ministros de Pesca de la Unión Europea (UE) afrontarán hoy la negociación de los Totales Admisibles de Capturas (TAC) pesqueras para 2010 y para España los asuntos de interés serán incrementar los cupos de merluza y la reapertura del caladero de la anchoa del Golfo de Vizcaya

El Consejo de Agricultura y Pesca comunitario celebrará hasta el miércoles su reunión tradicional de fin de año, para tratar de acordar los TAC y las capturas para el año que viene, en el caso de unas 80 especies, las de mayor valor comercial.

Asistirá la ministra española del Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, acompañada por el secretario general de Agricultura de Castilla y León, Eduardo Cabanillas, en nombre de las comunidades autónomas.

Los Veintisiete empezarán las discusiones sobre las cuotas pesqueras, con una nueva propuesta de compromiso de la presidencia sueca de turno de la UE y reuniones bilaterales para tratar de acercar posturas; el objetivo es cerrar un acuerdo el martes.

En esta negociación, España tratará de flexibilizar el proyecto presentado por la Comisión Europea (CE) sobre los TAC y cuotas, con el fin de aumentar las posibilidades pesqueras.

Entre las propuestas de la CE, destaca la intención de prolongar la veda de la anchoa o bocarte del Golfo de Vizcaya, que dura cerca de cuatro años y medio, por lo menos hasta julio de 2010 y en espera de que haya informes que acrediten que el caladero se ha recuperado lo suficiente.

España considera que la pesca de la anchoa se podría restablecer en enero, cautelarmente, con una cuota provisional que se revisaría a mediados de año, en vista de los dictámenes científicos de primavera.

Entre los argumentos en los que España se sustenta figura el informe del centro de investigación vasco AZTI, que constató en octubre la mejoría del caladero y dictaminó que la biomasa de juveniles de anchoa en el Cantábrico es un 33% superior a la de 2005.

Por su parte, Francia, que explota la anchoa conjuntamente ese recurso con España, se ha mostrado reticente a su reapertura y ha apoyado la posición de la CE.

Tradicionalmente los pescadores españoles capturaron la anchoa en el primer semestre del año y los franceses en el segundo.

Por otro lado, España solicitará aumentar un 7% las capturas de merluza en aguas del norte (como el Gran Sol, Golfo de Vizcaya, oeste de Escocia e Irlanda).

La merluza es el recurso de mayor valor comercial para la flota española.

Sin embargo, la Comisión ha propuesto reducir el TAC de merluza del norte en un 10%.

Tanto España como Francia argumentan que los informes científicos admiten interpretaciones distintas a las de la CE, por lo que sería sostenible aumentar el cupo de la merluza de los citados caladeros.

Por otra parte, España solicitará más flexibilidad en otras especies respecto a los TAC propuestos por Bruselas, en casos en los que haya un fundamento técnico.

Pedirá un incremento del 15% en las capturas de rape en aguas ibéricas, incluyendo el Cantábrico, Portugal y el Golfo de Cádiz, mientras que en este pez, la CE propone una bajada del 15%.

El Gobierno español solicitará que se mantenga el "statu quo" para la anchoa o boquerón del Golfo de Cádiz, el gallo en aguas ibéricas y el jurel de Canarias; en estos tres casos Bruselas plantea una rebaja del 15% en el TAC de 2010.

Para la presidencia sueca de turno de la UE la dificultad de la negociación entre los países estará en conjugar la necesidad de "reducir las cuotas lo suficiente para que recuperen las especies y garantizar cupos suficientes para que sobrevivan los pescadores".

Organizaciones ecologistas como Oceana, PEW y WWF han reclamado, en sendos comunicados, que los Veintisiete aprueben restricciones para proteger especies en peligro como los tiburones o las rayas y medidas para evitar los descartes (capturas no deseadas de peces que después, muertos, son arrojados al mar).