Este artículo se publicó hace 18 años.
Mueren 16 personas en una jornada de violencia que rompe la relativa calma en Irak
Al menos 16 personas- una de ellas un suicida- murieron hoy y 18 resultaron heridas en una jornada de violencia en Irak que ha roto la relativa calma que se ha vivido en este país en los últimos días.
Once personas, entre ellas tres soldados, murieron hoy y al menos once resultaron heridas, en dos ataques consecutivos de un grupo de insurgentes contra un puesto de control del ejército iraquí y una sede tribal en el sur de Bagdad, informaron fuentes policiales.
Las fuentes explicaron que un grupo rebelde, supuestamente vinculado a Al Qaeda, atacó el puesto de control de los militares iraquíes en el barrio de Hur Rayab, en el sur de Bagdad, y causaron la muerte de tres uniformados y heridas a otros tres.
Los atacantes se llevaron, además, un vehículo militar que estaba aparcado cerca del puesto de control.
Tras ese atentado, los rebeldes se dirigieron a bordo del coche robado a una sede de un consejo de clanes, situado en esa misma zona, y mataron a ocho combatientes tribales.
Las fuerzas de seguridad iraquíes han reforzado las medidas de seguridad en el lugar y llevan a cabo una operación especial para buscar a los atacantes, agregaron las fuentes.
Otras tres personas murieron y 13 resultaron heridas en dos atentados, uno de ellos suicida, perpetrados en Bagdad.
Fuentes policiales explicaron que un suicida al volante de un coche-bomba se empotró contra una patrulla de la policía en el barrio de Al Mansura, en el sur de Mosul.
En el ataque murieron dos civiles y resultaron heridos otros doce, entre ellos dos policías.
Asimismo varios vehículos quedaron totalmente destrozados por el efecto de la explosión.
Por otra parte, un policía iraquí murió y otro resultó herido por la explosión de un artefacto al paso de un vehículo policial en el barrio de al Nur, en el noreste de la capital.
Asimismo, la policía informó del hallazgo hoy de cuatro cadáveres de personas asesinadas en Bagdad.
Estos atentados coincidieron con un ataque con morteros contra la denominada "zona verde", una zona de máxima seguridad situada en el centro de Bagdad y que alberga la sede del gobierno y las principales embajadas abiertas en Irak, según fuentes de seguridad.
Al parecer una decena de proyectiles impactaron en distintos puntos de la "zona verde", aunque las fuentes desconocen si el ataque causó víctimas.
En esa área fortificada se encuentran las embajadas de EEUU y el Reino Unido, la sede del Gobierno iraquí, y el cuartel general de las fuerzas de la coalición multinacional encabezada por el Ejército estadounidense.
En un incidente separado, dos soldados iraquíes resultaron heridos por el estallido de un artefacto explosivo en una avenida del barrio Al Bayaa, en el sur de Bagdad, agregaron las fuentes.
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