Al menos 34 supuestos insurgentes han muerto en los últimos tres días en una ofensiva de las fuerzas de elite afganas y las tropas de la coalición liderada por EEUU en el sur afgano, donde los militares se han incautado de un alijo de 15.000 kilogramos de droga, informó hoy el mando estadounidense.

Según un comunicado, las tropas lanzaron el pasado martes una ofensiva para hacerse con el control de un bastión de los guerrilleros talibanes en la ciudad de Marjeh, perteneciente al distrito de Nad Ali.

La operación, que todavía continúa abierta, se está desarrollando en la zona del bazar de Loy Cherah, donde las tropas han llevado a cabo una "serie de ofensivas aéreas de precisión".

De acuerdo con la versión militar, la ofensiva no ha causado víctimas militares ni civiles, ya que las tropas se aseguraron de que no había civiles en la zona y dieron protección a los vecinos del lugar antes de iniciar los bombardeos.

Los soldados se han incautado de un importante alijo compuesto de 15.000 kilogramos de narcóticos de "alto grado", la gran mayoría opio de alto valor en el mercado negro, pero también 11 kilogramos de heroína procesada y 30 kilogramos de morfina.

Según el mando militar estadounidense, el valor de la droga incautada supera los 750 millones de dólares.

La cúpula de los talibanes ha ordenado a los insurgentes de las áreas vecinas que se desplacen al lugar de la ofensiva para reforzar a los combatientes locales y recuperar el alijo confiscado, reza la nota.

Además, los militares hallaron abundante material para la fabricación de explosivos, incluidos 40.000 kilogramos de nitrato de amoniaco, mapas, equipos de transmisión, morteros, armas ligeras y munición.

Loy Cherah está considerado como uno feudo de los talibanes y uno de los polos de almacenamiento y procesamiento de droga de la provincia de Helmand, donde se cultiva el 90 por ciento del opio de Afganistán.

El 50 por ciento de la financiación para las actividades de la insurgencia talibán procede del tráfico de drogas, agregó la comandancia en la nota.

Los combates de las tropas afganas e internacionales y los talibanes son frecuentes en el sur del país, especialmente en Helmand y en la provincia vecina de Kandahar, donde se encuentran los principales bastiones de la insurgencia.