Este artículo se publicó hace 15 años.
Mueren diez agentes y cuatro maoístas en un ataque en el este de la India
Al menos diez agentes de seguridad y cuatro supuestos maoístas han muerto en un ataque insurgente contra una mina y un cuartel policial registrado en el este de la India, según informó hoy la Policía.
El suceso tuvo lugar anoche en el distrito de Koraput, situado en el estado de Orissa, cuando un centenar de rebeldes armados asaltaron una mina pública de bauxita en la localidad de Panchpatmali, según una fuente policial citada por la agencia india IANS.
Los asaltantes también atacaron un campamento cercano de la Fuerza Central de Seguridad Industrial (CISF, siglas en inglés) en el que había almacenada una gran cantidad de explosivos, lo que dio pie a un enfrentamiento armado.
"Murieron diez miembros de las fuerzas de seguridad y cuatro maoístas. Al menos trece personas resultaron heridas", dijo a IANS el jefe de Policía del distrito, Deepak Kumar.
"Los maoístas quizá se pusieron la mina como objetivo para robar los explosivos que están guardados con vistas a las operaciones de extracción", dijo un funcionario de la compañía minera NALCO, de titularidad pública.
El funcionario agregó que los maoístas atacaron la mina en torno a las 21.30 hora local (16.00 GMT), cuando finalizaba el turno de tarde, de modo que unos 60 trabajadores quedaron atrapados en la mina hasta el fin de los combates.
"El trabajo de la unidad ha quedado suspendido hoy", dijo el funcionario.
Los maoístas están activos en más de la mitad de los 30 distritos de Orissa, donde han perpetrado varios ataques en las últimas semanas.
En los últimos días se han recrudecido además las actividades de los insurgentes maoístas, que han hecho pública su intención de boicotear las elecciones legislativas indias, cuyo comienzo está previsto para este jueves.
Los naxalitas, tal y como son conocidos los guerrilleros en la India, reclaman un Estado independiente en el centro y este del país basado en la ideología de Mao, y han amenazado con "cortar las manos" de los ciudadanos que acudan a las urnas.
Los rebeldes tomaron su nombre de la aldea bengalí de Naxalbari, donde en 1967 tuvo lugar una violenta rebelión de corte comunista.
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