Este artículo se publicó hace 16 años.
Dos muertos y 37 heridos en un fuerte seísmo en el Peloponeso
Dos personas murieron y 37 resultaron heridas en el terremoto de 6,5 grados en la escala de Richter que sacudió hoy a la península del Peloponeso, en el suroeste de Grecia, informaron las autoridades griegas.
Las víctimas son un hombre de 56 años y una anciana de 88 que fallecieron al desplomarse sus viviendas.
El ministro del Interior griego, Prokopis Pavlopulos, informó del derrumbe de 50 viviendas en diversas localidades y dijo que "los daños han sido limitados en relación con la magnitud del siniestro".
El seísmo, que ocurrió a las 15.25 hora local, se produjo casi un año después de los devastadores incendios forestales que dejaron más de 60 muertos en la zona del Peloponeso.
Las localidades más afectadas son las prefecturas de Achaia e Ilias, aunque el temblor se sintió con gran intensidad en diversos puntos del país, donde la gente salió a la calle incluso en localidades a más de 800 kilómetros del epicentro.
Los centros sismológicos griegos situaron el epicentro en Andravida, a 65 kilómetros al suroeste del puerto de Patras, donde se halla la falla geológica del "Eje del Egeo" que se extiende desde el mar Jónico hasta el norte del mar Egeo, pasando por el sur del Peloponeso.
El pueblo de la Antigua Olimpia, cuna de los juegos olímpicos de la Antigüedad, también sintió los efectos del terremoto, después de quedar arrasado gran parte del recinto arqueológico y su vegetación en los incendios de julio de 2008.
Georgos Aidonis, alcalde de Olimpia, declaró al canal estatal NET que el seísmo "sembró el pánico y la preocupación" entre los habitantes, influidos por los trágicos recuerdos del pasado verano.
También dijo que se produjeron "leves daños en el Museo Arqueológico y en tiendas de la ciudad, especialmente en las turísticas con objetos de cerámica".
Por su parte, Yanis Papandreu, alcalde de Andravida, epicentro del terremoto, dijo a la televisión que "nunca había vivido tal cosa en mis 65 años de vida", pero puntualizó que "afortunadamente, tenemos sólo heridos leves, mayormente producto del pánico".
En el pueblo cercano de Kato Achaia se derrumbaron varias viviendas, la mayoría antiguas, así como en otras localidades aledañas.
Los hospitales locales han atendido a más de 30 heridos, algunos de los cuales tuvieron que ser operados, informaron las autoridades hospitalarias.
En el puerto de Patras, uno de los mayores centros urbanos griegos, la mayoría de la gente se encontraba por la tarde en las plazas y espacios abiertos.
Los habitantes expresaron su intención de pasar la noche a la intemperie después de que los sismólogos vaticinaran que habrá varias réplicas.
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