El máximo negociador nuclear iraní, Said Yalili, pidió hoy en Tokio "el desarme de todas las naciones con capacidad atómica" para que "el crimen de Hiroshima no se vuelva a repetir".

Poco después de reunirse con el ministro de Asuntos Exteriores japonés, Katsuya Okada, Yalili pidió en rueda de prensa un esfuerzo global para alcanzar el desarme nuclear, y frenar la extensión y desarrollo de nuevas generaciones de estas armas.

El llamamiento coincide con la postura del Gobierno japonés, cuyo ministro de Exteriores transmitió hoy a Yalili su preocupación por las disputas sobre el programa nuclear de Irán y su rechazo a la propuesta de Naciones Unidas para enriquecer uranio fuera del país.

Asimismo, Okada dijo que espera que la prevista visita de Yalili a la ciudad de Hiroshima, al sur de Japón, sirva "para que éste vea el trágico resultado de un arma nuclear".

Yalili, cercano al presidente Mahmud Ahmadineyad, reiteró que los fines del programa nuclear de Irán son humanitarios, médicos y farmacéuticos, y que "el cumplimiento de los compromisos del Tratado de No Proliferación (nuclear) conlleva derechos" para desarrollar energía nuclear civil.

"Estamos dispuestos a hablar en el formato de las seis naciones para alcanzar una solución satisfactoria", dijo Yalili en referencia al diálogo con EEUU, Francia, Reino Unido, Rusia, China y Alemania sobre su programa de enriquecimiento de uranio, un proceso que puede ser usado también con fines militares.

El negociador nuclear iraní reiteró que su país adquirirá combustible nuclear en el exterior y colaborará con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), aunque recela de la propuesta para que el uranio se procese en terceros países.

Además, indicó que la oposición internacional a su programa nuclear afecta a otros países "como Sudáfrica, Egipto o Brasil" con intención de desarrollar un programa nuclear civil.

Por otro lado, Yalili negó que su país coopere con el régimen comunista de Pyongyang en tecnología nuclear o importe armas desde Corea del Norte, ya que no comparte su postura.