La Bolsa de Tokio rebotó hoy un 1 por ciento gracias a que los inversores compraron acciones infravaloradas y recuperó parte de lo perdido ayer en una jornada en la que cayó a su nivel mínimo desde septiembre de 2005.

El cierre de hoy con resultados al alza era el primero en positivo después de tres días de pérdidas.

El selectivo Nikkei ganó hoy 126,15 puntos hasta las 12.658,28 unidades, mientras el Topix, que agrupa a todos los valores de la primera sección, aumentó 10,76 puntos, o un 0,87 por ciento, y se situó en los 1.235,15 enteros.

Los sectores que hoy ganaron terreno fueron las industrias del hierro y el acero, como Nippon Steel y JFE Holdings, y los fabricantes de automóviles, entre ellos Nissan.

El líder en términos de volumen fue la acerera Nippon Steel que ganó 20 yenes, o un 4 por ciento, hasta los 478 yenes, tras haber caído un 13 por ciento en las pasadas cuatro sesiones.

El líder en términos de valor fue Toyota Motor, que aumentó 110 yenes, o un 2 por ciento, hasta los 5.310 yenes y recuperaba así parte de sus pérdidas de más de un 14 por ciento acumuladas desde finales de febrero.

Según agentes de la Bolsa citados por Kyodo, la caída de casi un 5 por ciento del Nikkei en las anteriores dos jornadas provocó un "rebote técnico" del parqué nipón por las ventas masivas de acciones a precio de ganga, aunque los inversores aún se mostraron escépticos por la influencia negativa de la economía de EEUU en la japonesa.

Para el estratega de la empresa de valores SMBC Friend, Fumiyuki Nakanishi, es "extraño" que el mercado de Tokio cerrara hoy en positivo cuando los temores a la crisis de las hipotecas subprime de EEUU se están intensificando.

En la primera sección, un total de 1.066 acciones avanzaron frente a 599 que retrocedieron y otras 115 que se quedaron como estaban.

El momento de debilidad del dólar estadounidense también se notó en la jornada de hoy, en concreto para la eléctrica Matsushita -que el 1 de octubre será rebautizada como Panasonic Corporation-, que hoy cedió 60 yenes, o un 3 por ciento, hasta los 2.130 yenes.

Otros perdedores en la sesión fueron el sector del metal, las compañías financieras y la industria minera.