Nilmar deshace el nudo amarillo

No está fino el Villarreal. Ante un rival apañadito y, eso sí, sobre un campo nuevamente pesado por la intensa lluvia caída, le costó vencer. Es como si los jugadores, prácticamente los mismos de la pasada temporada, extrañaran la batuta del nuevo entrenador. Valverde mantiene el estilo de juego de Pellegrini: tuya mía, tuya mía, pero le falta ritmo, engrase de piezas.

Y eso que la pareja Pereira Nilmar, recambios de Rossi y Llorente, empezó dando sensación de peligro. Fue un espejismo, enseguida languideció. Como languidece el centro del campo amarillo ante la falta de Senna. Hasta pudo adelantarse el Levski al filo del descanso. La entrada de Ibagaza y, sobre todo, de Rossi, mediada la segunda parte varió la situación, que amenazaba empate decepcionante. Marcó el brasileño Nilmar, que se estrenó dejando una estela de jugador brillante. La "obligada victoria" del Villarreal llegó con más apuros de los previstos.