"No me gusta ver jugar al Madrid, sólo va a lo seguro, que es ganar"

Lo de Dani Alves (Bahía, Brasil, 1983) en el Barça fue llegar y besar el santo. Desembarcó en el Camp Nou la temporada pasada con estela de crack el club catalán pagó por él 30 millones de euros al Sevilla y en su primer año como azulgrana ganó Liga, Copa y Champions. "Con la llegada de Dani podemos tener la mejor banda derecha del mundo", se atrevió a pronosticar entonces Guardiola. Ahora, el impetuoso lateral afronta con una sorprendente tranquilidad el clásico de mañana.

¿Cómo está de un golpe que arrastraba en un pie?

Bien. No me perdería el clásico por nada del mundo. Es el partido del año; todo el mundo está pendiente de lo que va a suceder y tenemos una maravillosa oportunidad para recuperar el liderato.

Algunos dicen que es más vibrante un Betis-Sevilla.

La grandeza del clásico es mayor, el derbi andaluz es fantástico, pero muy local. El mundo entero está pendiente del clásico. Es más espectacular

¿Se pone aún nervioso?

Notas que es un gran partido por las cosquillas en el estómago; el día que no sienta eso será porque ya no me importa el fútbol... Aunque creo que eso no pasará nunca. Me gusta sentir esas cosquillas porque significa que tenemos algo guapo enfrente.

"El 2-6 del Bernabéu fue un premio a cómo jugaba el Barça"

Si Guardiola no cambia los hábitos, ustedes no llegarán al campo hasta una hora y media antes de que comience el encuentro. ¿Cómo pasará la tarde?

Con el paso de los años he aprendido que pensar todo el día en el partido significa un desgaste demasiado importante que no te lleva a nada. Yo prefiero relajarme, leer, escuchar música, mirar la tele... Y cuando llego al estadio, empezar a pensar en el partido. Duermo la siesta y juego con mis hijos, aunque nada de tirarse al suelo como suelo hacer con ellos el resto de días.

¿Su referente es Cafú?

Cafú es mi ídolo. La gran historia de los laterales brasileños empieza para mí con Jorginho y continúa con Cafú, porque yo a Carlos Alberto no lo vi jugar. Tras ellos el lateral brasileño tomó una gran importancia en el fútbol, también con Roberto Carlos. Ellos coronaron esa posición.

¿Se siente un defensa con alma de delantero?

Yo tengo alma de futbolista. A veces la gente piensa que para ser un gran zaguero tienes que mantener la posición ahí atrás; yo creo que cuanto más arriba defiende el equipo, mejores defensores somos. Mantienes al contrario lejos de la portería y dificultas que te creen ocasiones. Yo he mejorado muchísimo aquí, he conseguido equilibrio entre mi faceta de defensor y atacante.

"He mejorado tácticamente y he aprendido a jugar sin balón"

Jugarle al Madrid con las líneas muy avanzadas conlleva sus riesgos.

Ya, pero en el fútbol sólo ganan los que arriesgan; los que no, siempre serán perdedores. No puedes salir al campo esperando a lo que acontezca, sin tomar la iniciativa. No cambiaremos nuestra forma de jugar por tener un determinado equipo o jugador enfrente. Con equipos que también atacan tenemos que mantener un orden. Hay que saber leer los partidos.

¿Eso lo ha aprendido con Guardiola?

Desde que estoy en el Barcelona he aprendido mucho tácticamente. En el Sevilla jugaba mucho con el balón, el juego pasaba mucho por mis pies y tenía que atacar y atacar; hacer jugar a mis compañeros y a veces no podía llegar a defender. He aprendido a jugar sin balón y eso te hace mejor tácticamente. Ahora sé qué hacer y cuándo hacerlo. Ves a Xavi, Iniesta y Messi y no son jugadores de carácter defensivo, pero están tan bien posicionados que recuperan muchos balones. Un gran defensor no es el que pega y juega duro, sino el que sabe posicionarse en el campo.

Hablando de Messi, ¿qué pierde el equipo sin él?

Pep trabaja para que no echemos de menos a nadie; no puedes tener dependencia de un jugador, aunque un futbolista como Messi, si no está, hace falta a cualquiera. Ante el Inter intentamos que se notara lo menos posible su ausencia y lo conseguimos. Eso hace ganar fuerza al equipo. El grupo crece de estas situaciones y al final ganamos todos.

"Cuanto más arriba defiende el equipo, mejores defensores somos"

Con el fichaje de Ibrahimovic, usted recupera el recurso de los centros que tanto aprovechó con Kanouté.

Ibra nos va muy bien cuando jugamos con equipos que se echan atrás. Entonces, tenemos una referencia para jugar más directo; es muy grande, pero muy rápido.

Ronaldo está a punto. ¿Ha pedido consejo a Puyol, que lo secó en la final de Roma, de cómo anularle?

No. Carles estuvo fenomenal ese día, pero no hemos hablado de eso. Fue una jornada muy extraña para mí [no jugó por sanción], de felicidad por coronar el trabajo y tristeza por no poder jugar. Lo pasé muy mal en la grada.

¿Le gusta cómo juega el Madrid?

A mí me encanta el fútbol y siempre estoy viendo partidos, pero no me gusta ver al Madrid. A mí me agrada ver espectáculo y el Madrid sólo va a lo seguro, que es ganar; es líder por resultados. Vencer sin jugar bien también es bueno, pero la gente que va al campo quiere algo más que ver ganar a su equipo.

"Sólo estando bien posicionado ya recuperas muchos balones"

Pero pueden ver a Kaká.

Kaká es un chico fantástico y un jugador fenomenal. Para que te den el título como mejor del mundo tienes que ser diferente. Aportará muchísimo al Madrid.

¿Hay alguna posibilidad de que mañana se repita algo parecido al 2-6?

No creo, no suele pasar en un clásico. Pero el fútbol a veces es justo con el fútbol mismo y ese resultado fue un premio a cómo jugaba el equipo. Fue como un ¡viva el fútbol! Ya no me parecía honesto que, haciendo el fútbol que hacíamos, el Madrid siguiera con opciones de ser campeón. Al final, cada uno estuvo en su sitio.

¿Qué queda del Dani Alves que nació en el seno de una familia del campo?

He aprendido que para conseguir las cosas como persona y profesional hay que trabajar y sufrir, yo pasé por eso para alcanzar mis metas; si vienes de una familia humilde valoras más lo que tienes. No cambio mi vida por la de otro.

Tiene fama de ser el bromista del vestuario.

Ahí hay mucho personaje.

"Mi referente es Cafú; él y Jorginho dieron prestigio en Brasil al lateral"

¿Cuál fue su última trastada?

No son cosas en concreto. En este vestuario hay gente muy graciosa. Tenemos que conseguir que la convivencia sea alegre. Para que la cosa funcione, tenemos que echarnos de menos. Cuando me voy de vacaciones, echo de menos estar con esta gente; el vestuario es una alegría, vayan bien o mal las cosas, y esa es una de las claves para conseguir que todo funcione. Tenemos el mejor vestuario del mundo.

Como gran fan que es de la Fórmula 1, ¿qué le parece el aterrizaje de Alonso en Ferrari?

Me alegro por él. Un piloto como Alonso merecía un gran coche, sin querer menospreciar a su antigua escudería. Las diferencias en la Fórmula 1 según el coche que tiene son muy grandes, son autos que van a toda leche. Espero que en Ferrari pueda volver a lo más alto. A los brasileños Senna nos marcó mucho. Ahora estamos muy bien representados con Barrichello y Massa.