"No podemos pagar los platos rotos de la mala gestión de Prisa"

Los trabajadores de CNN+ han mostrado este miércoles su total rechazo al cierre de la cadena, anunciado hace unos días por el grupo Prisa.

En un manifiesto redactado por los trabajadores del canal, critican que tengan que pagar los platos rotos "de la mala gestión de la dirección del grupo Prisa, que transformada en un tiburón financiero ha olvidado la vocación periodística con la que nació".

En este sentido, hay que recordar que el cierre de CNN+ por parte de Prisa es un daño colateral de la entrada hace apenas un mes del fondo especulativo estadounidense Liberty Acquisition Holdings en el grupo español.

En el acuerdo de fusión de Cuatro -cuya propiedad antes era de Prisa- con Telecinco el grupo cedió a la cadena de Mediaset su licencia de televisión en abierto, pero Telecinco no está interesada en tener un canal de noticias.

Por esto, los trabajadores del canal afirman: "Nosotros no queremos dedicarnos a las finanzas, queremos seguir haciendo periodismo al servicio de la sociedad".

El cierre tras once años de emisión del canal es visto por los firmantes como una forma de silenciar a una parte de la sociedad.

El manifiesto culmina con una última crítica y un último mensaje al grupo del que hasta ahora formaban parte: "Su errática singladura la tienen que pagar ellos. Sólo nos queda decirles que como sentenció el filósofo 'no hay viento favorable para el que no sabe adónde va'".

Al manifiesto se ha adherido numerosas personalidades, así como miembros del mundo de la cultura y la comunicación. Entre ellos se encuentran Rosa Regás, Pilar Bardem, Penélope Cruz, Daniel Sánchez Arévalo, Blanca Portillo, Rosa María Calaf, Monserrat Domínguez, Juan López de Uralde, Andreu Buenafuente, Eduardo Mendicutti, Maruja Torres, Eva Hache, Rosa María Artal o Juan Diego, entre otros.

Además, los Comités de Empresa del Grupo Sogecable, han convocado una concentración el próximo martes 28 de diciembre a las 20,00 horas frente a la sede del Grupo Prisa, en la calle Gran Vía, 32 de Madrid para protestar por el cierre del canal.